Pasaban unos minutos sobre la doce la madrugada de ayer cuando varias llamadas alertaban a la central de emergencias del 112 de que en el cuarto piso del número 10 de la calle Massanella, en La Vileta de Palma, se había declarado un virulento incendio. Con suma diligencia, agentes del Cuerpo Nacional de Policía, Bombers de Palma, Policía Local y personal sanitario del Servei d'Atenció Mèdica Urgent (SAMU-061) se desplazaron hasta el lugar del suceso. Los primeros en llegar fue una patrulla de la Policía Nacional. Las zonas comunes estaban llenas de humo y se estaba procediendo al desalojo del edificio. En un momento dado, informaron a los policías de que en una de las viviendas había un anciano, de 90 años, con movilidad reducida y que utiliza una silla de ruedas. Los agentes no dudaron en tirar la puerta abajo y así como pudieron, coger al hombre y ponerlo a buen recaudo. De no ser por la actuación policial, el anciano hubiera fallecido quemado en su domicilio.
Acto seguido, llegaron el resto de equipos de emergencia y se acabó de desalojar todo el edificio y marcar un perímetro de seguridad. Tras comprobar que no quedaba nadie dentro de las casas, los Bombers de Palma sofocaron el incendio. Los trabajos de extinción se prolongaron durante varias horas. Una vez apagado el fuego, se procedió a la ventilación del inmueble para que los vecinos pudieran regresar a sus casas.
Por su parte, la Policía Nacional comenzó la toma de declaraciones de los testigos con la finalidad de esclarecer las causas del fuego. No tardaron en darse cuenta que el mismo había sido totalmente intencionado y que el foco del fuego se encontraba en una de las habitaciones del presunto autor. Por lo que parece y, a falta de confirmación oficial, el ahora detenido mantuvo una acalorada discusión con su pareja sentimental. En un momento dado, la mujer cogió a la hija que tienen en común y decidió abandonar el inmueble por miedo a lo que pudiera hacer su esposo. Durante el enfrentamiento, el varón había amenazado con prender fuego a la casa con ellas dos dentro, refiriéndose en todo momento a la mujer y a su hija pequeña.
El hombre, lejos de tranquilizarse, cumplió con sus amenazas, se dirigió a una de las habitaciones e incendió el colchón. A partir de ese instante el fuego se propagó por todo el inmueble y él se dió a la fuga. Cuatro personas resultaron intoxicadas, entre ellos varios agentes. El acusado se encuentra detenido en dependencias policiales. Se trata de un rumano de 22 años. El juez ha decretado para el autor de los hechos prisión sin fianza y comunicada después de analizar los hechos.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.