Los agentes comprobaron entonces, con los sistemas informáticos de que disponían en su coche patrulla, que la furgoneta que conducían los dos hombres era robada, por lo que sospecharon que se trataba de dos ladrones que querían sustraer mercancías de los camiones estacionados en el área de servicio. Cuando los ocupantes de la furgoneta se percataron de la presencia de los Mossos, emprendieron la huida por la misma autopista en dirección norte y se detuvieron en el kilómetro 52,5, donde la vía atraviesa una zona boscosa, en el municipio de Sant Julià de Ramis.
En ese momento, los dos ocupantes bajaron por el lado izquierdo del vehículo y, según las primeras investigaciones de los Mossos, no se percataron, por la oscuridad de la noche, que estaban sobre un puente de gran altura. Los dos presuntos ladrones se precipitaron desde unos 30 metros de altura y fallecieron a consecuencia de la caída. No han podido ser identificados y sus cuerpos se encuentran en el instituto forense de Girona a la espera de que se practiquen las autopsias. Los Mossos mantienen abierta la investigación por este caso, que vinculan al robo de camiones de furgonetas en la autopista.
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