El Ca Nostra del 2000 está en marcha. O al menos, eso es lo que pretenden sus dirigentes, que ya están trabajando en un proyecto deportivo e institucional, que presentarán seguramente la semana próxima al alcalde de Sant Antoni, Antoni Marí Tur. Manel Bosch, técnico del primer equipo, está diseñando las líneas básicas que deben regir la planificación deportiva del club. «El proyecto, aunque aún no está cuantificado, podría ser válido para los próximos cuatro años», explica Bosch. Como pilares destacados de esta nueva etapa, el técnico propone ampliar la actual escuela de minibàsquet de 40 a 60 ó 80 niños. Además, también habría un cambio de ubicación. Los más jóvenes dejarían de entrenar en Vara de Rey para ejercitarse, en mejores condiciones, en el gimnasio cubierto del colegio de Ses Variades, que necesitaría la instalación de canastas.

La idea es incrementar los equipos inferiores. «Hay que potenciar la base», asegura Manel. El objetivo es que el próximo año hubiera un infantil masculino y dos femeninos, un cadete y un júnior masculino y un femenino, el sénior de Segunda y un equipo intermedio entre éste y el júnior, en función de la categoría que disponga la Federación para ello. Otra novedad sería intentar recuperar el sénior femenino. Toda estructura pasa por que el primer equipo del club no baje de Segunda, cosa que está a punto de conseguir matemáticamente. En este caso y contando con el apoyo adecuado Bosch plantearía volver a formar un equipo con aspiraciones de quedar entre los cuatro primeros.