El Palacio de Congresos de Ibiza-PDV se acerca cada vez más a Liga Femenina 2. El conjunto ibicenco desaprovechó ayer la penúltima oportunidad de engancharse al tren de la permanencia tras perder claramente ante el Real Canoe (71-57), por lo que es sólo cuestión de tiempo, una o dos semanas como máximo, para que el descenso sea matemático. La semana que viene recibe al Ciudad Ros Casares y en ese partido, dependiendo de otros resultados, podría acabar por consumarse la tragedia, aunque seguramente habrá que esperar al 13 de marzo si se pierde en la pista de Hondarribia para que ya sea matemático.
El encuentro ante el Real Canoe era clave. En su pista se jugaba el todo por el todo si quería seguir siendo equipo de Liga Femenina la próxima temporada. Era un rival que le traía buenos recuerdos, teniendo en cuenta que la primera victoria liguera se logró ante la escuadra dirigida por Juan Díniz, además con bastante solvencia (66-54). Las ibicencas viajaban a Madrid con mucha ilusión y conscientes de que no se podían permitir otro tropiezo. Sin embargo, todas las buenas intenciones se difuminaron con el paso de los minutos. Nunca tuvo opciones de victoria. Sólo en una ocasión (2-3, minuto 2) se puso por delante en el marcador tras un triple de Lorena Infante. El resto del encuentro tuvo claro color local que, además, también se jugaba buena parte de sus aspiraciones de permanencia.
El equipo madrileño cerró el primer cuarto con una ventaja de siete puntos (24-17) y en el segundo periodo alcanzó una máxima diferencia de 12 puntos (38-26, minuto 19). A partir de entonces el partido se movió en esos guarismos, con un Palacio de Congresos que era incapaz de recortar distancias. El primer tiempo acabó con otra noticia desalentadora para las ibicencas. Alicia López, Shannon Johnson y Nakia Sanford, las tres jugadoras que debían tirar del carro, sólo habían anotado cuatro puntos entre las tres en los primeros 20 minutos de juego. Mientras, el tridente del Canoe, formado por Laura García (13 puntos), Marta Blanes (11) y Marina Ferragut (7) funcionaba a las mil maravillas.
Sin cambios
El paso por los vestuarios no significó ningún cambio positivo para el equipo ibicenco, ni en acierto ni en intensidad de juego. Las madrileñas mantenían su ventaja con una comodidad que sin duda no esperaban teniendo en cuenta lo que había en juego. En los últimos diez minutos no hubo ni siquiera un sobresalto. Lo máximo que se acercó en el marcador el equipo que entrena Àlex Pérez fue en el minuto 36, cuando Krissy Bade -máxima anotadora de su equipo junto a Pirsic, ambas con 11 puntos- acertó desde la línea de 6,25 para colocar el 62-51 en el electrónico. No hizo mucho más. Al final, triunfo claro para el Canoe, que se coloca ya a cuatro victorias y el basket-average a su favor. Por su parte, sus otros dos rivales por la permanencia, el Estudiantes y el Hondarribia, perdieron sus respectivos partidos, por lo que siguen a dos victorias de diferencia (tres si se tiene en cuenta el basket-average en el caso del Estudiantes) de las ibicencas.