La plantilla de la Peña Deportiva, durante su primer entrenamiento de 2012.

La crisis económica que afecta a clubes de diferentes deportes de élite en la Isla también ha alcanzado al fútbol, una de las disciplinas que parecía escapar a las dificultades económicas, al menos en las Pitiüses.
Las deudas que arrastran las instituciones con las entidades deportivas y algunas complicaciones con los pagarés bancarios han levantado la caja de los truenos en la Peña Deportiva, cuya directiva está teniendo dificultades para llevar al día el pago de las nóminas de sus futbolistas.
Según ha podido saber esta redacción, el club que preside Juan Marí ha podido apaciguar los ánimos del vestuario con el ingreso de la mensualidad correspondiente a noviembre en fechas recientes. Sin embargo, mantiene pendiente el sueldo de diciembre, circunstancia que no ha sido bien acogida por la mayor parte de los futbolistas foráneos, quienes deben sufragarse gastos como la manutención o el alojamiento con los únicos ingresos que proceden de la entidad de Santa Eulària.
La plantilla ha decidido no hacer público su malestar confiando en la palabra de uno de los clubes más solventes de Balears; una entidad que siempre ha servido de ejemplo por su seriedad en este tipo de asuntos.
La delicada coyuntura económica ya provocó una importante reducción del presupuesto destinado al primer equipo para la presente temporada. Lo que no tenía previsto el club es que a primeros de enero no existiría liquidez para pagar a sus jugadores las dos últimas mensualidades, con el consiguiente malestar de una parte del vestuario de Tercera división.
El hecho de que el club anunciara su intención de reforzar la plantilla contribuyó al enfado de varios miembros del equipo, si bien la decisión ahora es la de remar en la misma dirección dados los buenos resultados del equipo desde la llegada de Matías Fernández y a ese último ingreso por parte del club.
La Peña se justifica
Desde la Peña justifican el retraso en los pagos por la problemática actual con las entidades bancarias y la demora en los procesos puramente burocráticos, acentuada por las festividades navideñas. El club, eso sí, espera poder disponer de efectivo la próxima semana para saldar la mensualidad de diciembre con la plantilla.
No obstante, fuentes de la directiva consultadas por esta redacción reconocen que existirán dificultades económicas más serias a partir del mes de febrero, fecha desde la cual resultará imprescindible ingresar las partidas pendientes de las instituciones.