Adiós familiar

ANDORRA: 2

Entre los aplausos y los agradecimientos mutuos que se dieron los apenas 50 espectadores que acudieron al pabellón y la afición acabó el periplo del Space Gasifred en Segunda División, en un adiós familiar. El equipo azulino se despidió a lo grande, con una victoria contra el Andorra en un emocionante partido, pero con la espina clavada de que no sirvió para nada. Y es que el Hospitalet no perdonó ante el Playas de Castellón (3-5) y se ha quedado con la antepenúltima plaza, que oficiosamente tiene todas las papeletas de servir para permanecer en la categoría por la desaparición del Benicarló.

El equipo azulino ofreció una de sus mejores caras de la temporada. Creó ocasiones, tuteó a un rival superior tanto en lo técnico como en la profundidad de banquillo, y se adjudicó el triunfo ‘in extremis’ gracias a un gol de Juanito, que marcó los tres tantos de los suyos en la que fue, presumiblemente, su mejor actuación con la elástica azulina a nivel individual.

Los andorranos pagaron caro el hecho de no centrarse única y exclusivamente en su partido. Como si lo tuvieran ganado de antemano y sin bajarse del autobús por la simple cuestión de enfrentarse al penúltimo, se pasaron el partido más pendientes de cómo iban los marcadores en otras canchas para saber si entraban o no en el ‘play off’ que de hacer su trabajo. Eso pasó factura. Y es que si no estás cien por cien concentrado en lo tuyo, el más pintado te pinta la cara.

El inicio resultó esperanzador para los locales. Leo lo intentó hasta por partida triple desde el exterior, al igual que Clayton, pero la pelota no quería entrar. El síndrome de toda la temporada, ése que parece achicar las porterías para los pitiusos, volvía a hacer acto de presencia. Encima, se repitió la historia de siempre. Perdonó el cuadro de Julio Mougán, pero no su adversario. Un error en la salida de presión contrajo una perfecta triangulación entre Soty, Carlinhos y Diego, que marcó a placer a los siete minutos.

Remontada

Rebasado el ecuador de este primer acto, Juanito inició su festival goleador. En apenas un minuto, el Space Gasifred volteó el marcador con dos tantos del jugador cedido por el Barça B. En una persistente presión a tres cuartos, el catalán le robó la cartera a Cabinho y combinó con Clayton para marcar a placer el primero. Poco después, culminó a la perfección una asistencia de Tote.

Pero el ‘Gasi’ no supo mantener su ventaja al descanso. Nacho, en una acción individual por el costado derecho, se marchó de dos defensores y engañó al portero para igualar la contienda. Un poste de Tote y otro de Moisés, prácticamente sobre la bocina, cerraron una intensa primera mitad.

Tras el asueto, y una vez informados los andorranos del resto de marcadores, el encuentro entró en una fase de continuo intercambio de golpes. Eso sí, ninguno llevaba a la lona al rival. El balón no entraba a pesar de que hubo alguna que otra oportunidad clara de gol, sobre todo por parte azulina. Toni Rosselló y Clayton, que lanzó alto a apenas un metro de la portería, tuvieron las mejores ocasiones para desnivelar la balanza. También Diego, a falta de 2’23’’, pudo haberlo hecho, pero Juanan se mostró intratable en el mano a mano.

Diecisiete segundos después, la apoteosis llegó a sa Blanca Dona. Leo, el más listo de la clase, sacó con rapidez de banda para que Juanito, con un duro disparo, pusiera en franquicia el triunfo al Space Gasifred.

Portero-jugador

Restaban apenas dos minutos y al Andorra no le quedó otra que jugar de cinco, con Carlinhos con la elástica de portero-jugador. Diego falló nuevamente en la única ocasión que generaron los visitantes y Juanito, tras recuperar el balón en la medular, se quedó sin formar un póquer de goles por muy poco. El marcador ya no sufrió cambios y los dos equipos acabaron cariacontecidos sobre la pista, sobre todo el Andorra. Y es que el ‘Gasi’, al menos, cumplió su trabajo.