El parón navideño no parece haber ayudado a refrescar las piernas y la cabeza de los futbolistas, al menos de los que ayer disputaron el choque en el Municipal de Sant Rafael, donde el equipo local y el Penya Ciutadella de Dani Mori escenificaron su particular pacto de no agresión para firmar tablas en el primer encuentro de 2013 (0-0).

El choque resultó soporífero para los más de 300 aficionados que se citaron en las gradas del Municipal a pesar del frío que arreció ayer en la localidad de la Cruz. Pocos argumentos positivos arrojó el partido, entre ellos el debut del central andaluz Juanma Perera, quien gozó de la titularidad para demostrar que es un defensa con carácter y calidad que mejorará con creces la competitividad del plantel en la retaguardia.

Las ausencias de Salinas y Berto Vaquero, ambos por sanción, restó brillantez a un partido que careció de intensidad y ocasiones de peligro. Carlos Moro fue un mero espectador y solo tuvo que intervenir en un zapatazo de Tofúl desde el vértice izquierdo tras una cabalgada del extremo José Luis. Corría el minuto 15 y, a partir de entonces, el grupo menorquín se olvidó de atacar y únicamente buscó la cabeza del ‘tanque’ Zurbano y las segundas jugadas que genera. Ayer, ninguna, dicho sea de paso.