Canseco, con el trofeo de campeón de la Liga Nacional de Clubes de Primera División. | Redacción Digital

Víctor Canseco vive su segunda semana de preparación para la temporada 2014-15. El máximo exponente del judo pitiuso, que tiene en su currículum multitud de subcampeonatos nacionales absolutos, campeonatos de España sub 23 y un bronce europeo de esta categoría, preparará en la isla su asalto al trono nacional a diferencia de años anteriores, en los que se forjó en Madrid y en Valencia.

—¿Qué diferencias hay entre entrenarse en la isla o en la península?

—En cuanto a la preparación física, ninguna. Voy al gimnasio al igual que lo hacía allí. Los ejercicios son los mismos. La única diferencia es el tema de la preparación del judo en sí, de la técnica. Allí sí tenía más gente de mi peso para entrenar, pero ahora no es eso lo que más me preocupa. El judo lo sigo teniendo. Lo que más prisa me corre es la forma física. Cuando tenga que hacer judo, ya saldré a la península una o dos semanas a preparar algún campeonato en específico, algo que sería a largo plazo.

—¿Cuáles son sus retos para este curso?

—Primero, ponerme físicamente fuerte y ganar lo antes posible el estado de forma física ideal sin resentirme de la lesión de espalda. Para 2015, iré al Campeonato de España e intentaré de cara a 2015, Campeonato de España e intentar salir viajar al mayor número de Copas de Europa. Así rodaré y ganaré puntos para hacer luego Copas del Mundo, clasificatorias para Río’16.

—La temporada pasada no pudo asistir al nacional por lesión. Tras tantos años intentando superar a Ángel Parra en la final, ¿qué se siente al ver cómo lo ha conseguido otro en su ausencia?

—Es duro. Yo hice mi primer Campeonato de España en 2002 y mi primer podio se produjo al año siguiente. La campaña pasada fue la primera vez que no asistí al Campeonato de España y no pude competir a nivel nacional ni internacional. Después de 11 años yendo a todos los campeonatos de mi categoría y superiores, consiguiendo medallas en todos ellos, ha sido duro estar fuera de la competición. La lesión de espalda me obligó a estar apartado al ser una dolencia muy delicada. Tenía que parar. Tras un año parado, ahora cojo el judo con más ganas. Me habría gustado ser yo el que pusiera fin a la supremacía de los últimos años. Ya en 2013 estuve a punto de hacerlo, pero hubo una final un poco dudosa en cuanto a decisiones arbitrales. De todas formas, el objetivo es ser campeón de España batiendo a Parra, a David Fernández, que es el actual campeón, o a quien sea.

—Afortunadamente, no le cortan las subvenciones pese a no obtener resultados la temporada pasada y podrá pelear por su sueño.

—Sí que es cierto que no he conseguido los resultados de otros años, pero también que no he dejado de competir porque me apeteciera, sino por una lesión. Las principales subvenciones se siguen manteniendo, porque, en caso de lesión y habiendo obtenido buenos logros en los años anteriores, una comisión decidió, con un certificado médico, que contaran los éxitos de mis dos años anteriores. No sería justo que, por un año que no compito por lesión, dejase de ingresar las subvenciones. Tuve la mala suerte de que se agravó en abril, cuando tenía que estar preparando el Campeonato de España. Si hubiese sido en junio, habría competido con total normalidad y probablemente habría subido al podio.

—Ahora que está en la isla, ¿cómo será su relación con el Club Sant Jordi?

—Mantengo mi licencia por este club. Estoy ilusionado con esta nueva etapa aquí e intentaré aportar mi granito de arena al club. De momento, tengo el total apoyo tanto de Teo Blázquez como del resto del club. Pienso que al club le puedo aportar cosas que le van a servir para seguir creciendo y a mí me puede aportar otras para que lo haga yo como deportista. Por lo demás, al igual que antes, la Liga Nacional de Clubes la disputaré con el Judokan Valencia tras rechazar ofertas de otros equipos de Primera.

—¿Colaborará usted, que debe ser un espejo para los jóvenes, con la cantera del club?

—De momento, lo que más me preocupa, siendo egoísta, soy yo. Tengo que ponerme mucho las pilas y mucho trabajo por hacer. Mientras no deje de hacer todo lo que debo para cumplir mis objetivos, puedo aportar mi granito de arena a los que vayan saliendo, pero las figuras que se están dedicando a la enseñanza son Teo y otros entrenadores.