Alexia Hartmann, a la izquierda, en el Patio de Armas, a las puertas del Portal de ses Taules. | (c) Sergio G. Canizares

Adrián Guirado y Alexia Hartmann volvieron a hacerlo. Al igual que el año pasado, completaron la Cursa Patrimoni de la Humanitat en primera posición. Pero no se conformaron con revalidar la corona, sino que, además, batieron el récord de una prueba que contó con la participación de 520 corredores, 398 de ellos en la prueba absoluta.

En categoría masculina, Guirado consiguió su segunda victoria en dos carreras que lleva con la camiseta del Ample32. Fue el único capaz de completar el recorrido, de 10 kilómetros de distancia, en menos de media hora. Con un tiempo de 29’35’’, se proclamó campeón con más de un minuto de ventaja sobre el segundo clasificado, Josep Torres. El duatleta brilló hasta el punto de acabar segundo con un crono de 30’45’’, justo por delante de un José Planells (31’28’’) que venía de ganar el sábado la Cursa de la Constitució Memorial John Tunks en Formentera.

Guirado no tuvo rivales. De hecho, los que estaban capacitados para plantarle algo de batalla no pudieron hacerlo. Salva Crespo (Club Atletisme Pitiús) se retiró lesionado, mientras que Samuel Urbano, en fase de recuperación, optó por irse a entrenar en lugar de participar.

En categoría femenina, Alexia Hartmann volvió a ser la número uno con un tiempo de 35’55’’. La del Club Atletisme Pitiús sacó más de dos minutos y medio a la segunda clasificada, Sabi Corral. La del Sa Raval firmó un registro de 38’33’’, dos segundos menos que Ana Bella Castaño. Sorprendió el puesto que obtuvo Indre Barkute (Ample32), que se tuvo que conformar con ser sexta (39’31’’).

A tope

Adrián Guirado confesó tras la carrera que tuvo «muy buenas sensaciones». «He salido desde el principio rápido, porque sabía que estaba en buena forma y ha salido bien la jugada», comentó el ganador. Por su parte, Alexia Hartmann restó importancia al triunfo porque se toma esta prueba «como un entrenamiento». Eso sí, afirmó que dio más de lo habitual porque tomaba parte una corredora desconocida, Rocío Caballero: «Había una chica que no había visto nunca y, como no la conocía y no sabía cómo corre, apreté».