En la imagen se ve el instante en el que Piquero cabecea en plancha para poner el balón lejos del alcance del meta del Llosetense, que observa el vuelo del balón. Supuso el 2-0 para la Peña.

PEÑA DEPORTIVA: 2

LLOSENTENSE: 0

Cabezazo a cabezazo, en un caso similar al del Atlético de Madrid en Primera División, ha emprendido su escalada la Peña Deportiva hacia los primeros puestos de la Tercera balear. El equipo de Mario Ormaechea se impuso ayer gracias a sendos testarazos de Pau Pomar y Diego Piquero al Llosetense, hasta ayer líder de la categoría.

Los blancos culminaron en el último encuentro de la primera vuelta su particular remontada hacia la zona noble y ya divisan a solo dos puntos el liderato, que ayer pasó a manos del Formentera. Con Ormaechea en el banquillo, como recordó el técnico tras la victoria, el equipo de Santa Eulària no ha perdido dos partidos seguidos. Una racha que alcanza ya los 106 encuentros y que tiene como principal objetivo repetir presencia en los play off de ascenso a Segunda B.

Tras el parón navideño, tardaron un buen puñado de minutos en entrar en calor ambos equipos, dos de los más fuertes de la categoría. El Llosetense abrigó bien su defensa y no dejó resquicios a una Peña que, como siempre, trató de llevar la iniciativa.

Pasados los primeros 20 minutos comenzó a carburar el bloque ibicenco. Aunque con escasa profundidad, Ramiro logró explotar el perfil diestro y de sus botas (y brazos, en saques de banda) emergieron las primeras ocasiones del equipo. La mayoría en balones aéreos, donde la Peña explota con precisión de cirujano tanto su poderío como la pizarra del entrenador. Así llegó el primer tanto de 2015, tras un córner botado por el alicantino que cabeceó en el punto de penalti Pau Pomar. El mallorquín brincó con decisión y empotró el cuero en la red para adelantar a los peñistas antes de la primera media hora de juego.

Sentencia

El Llosetense encajó como pudo el golpe y, mientras trataba de reaccionar, vio cómo la Peña encontraba más fisuras por las que sentenciar el choque. Apenas ocho minutos después, el cuero viajó al área visitante donde Vicent centró de primeras para que Piquero embocara el balón de precisa plancha en el aire (min. 36). El escorzo del ‘9’ cántabro resultó tan hermoso como efectivo. Sólo un minuto después pudo aumentar su cuenta, pero la zaga sacó bajo palos un remate a bocajarro del delantero.

Fueron los mejores minutos de un partido que entró en decadencia en la segunda mitad. La Peña aguantó con decisión el empuje visitante y pudo sellar la goleada en un disparo de Raúl Gómez que escupió el travesaño. Sólo la innecesaria expulsión de Pomar en la recta final empañó el solemne ingreso de la Peña en el nuevo año.