Una imagen de un partido de categorías bsae de esta temporada entre el Insular y el Sant Carles. | Toni Escobar

El deporte pitiuso, al igual que el nacional, está en pie de guerra. El motivo no es otro que la nueva Ley de Apoyo a los Emprendedores impulsada por el Consejo Superior de Deportes, que obliga a los clubes modestos a dar de alta en el régimen de la Seguridad Social a sus monitores y colaboradores. Las reacciones a lo publicado ayer por este rotativo no se han hecho esperar en el círculo deportivo insular. Sin ir más lejos, Juan Ruiz, gerente del Gasifred Atlético de fútbol sala, tilda de «locura total» esta medida. «Es absurdo», añade Miguel Ángel Escandell, vicepresidente del Handboll Club Eivissa.

«Sé que vendrá Miquel Bestard para aunar fuerzas y nos avisarán para reunirnos con él. Entiendo que un club de Segunda, como cuando nosotros estábamos ahí, tenga que cumplir con estas cosas al ser semiprofesional, pero a nosotros, que estamos en Tercera y tenemos que hacer milagros para que alguien nos venga a ayudar, tengamos que hacer eso, me parece mal. Imagina que nos obligan a asegurarlos teniendo en cuenta que no aparecen patrocinadores y no tenemos un duro. Al que se le haya ocurrido la idea seguramente podría haber tenido otras diez mejores. Nosotros estamos promoviendo la base y colaborando en Tercera. Me parece una cosa de muy poca gracia y que va a suponer un flaco favor a los clubes. ¿Qué va a pasar? Pues que cuando metan un poco de presión a clubes de Regional o Tercera, estos dejarán de trabajar con la base y los niños. Si lo piensan un poco, se darán cuenta de que es una muy mala idea que va justo en contra de la base. La gente que ayuda lo hace sin cobrar. Es una locura total. Al Madrid o al Barça no les va a afectar, pero a los que estamos abajo, sí», explicó Juan Ruiz.

«Es absurdo»

Miguel Ángel Escandell también fue claro al respecto. «Es absurdo», sentenció. «Está claro que hay que saber diferenciar entre el deporte base y el profesional. El fútbol, incluso en Tercera y Regional, está más profesionalizado que el resto de deportes. Entiendo que todo se tiene que regular, pero no comparemos un utillero de un club de Segunda B con un monitor de un equipo prebenjamín de balonmano, por ejemplo. No tiene nada que ver. Las cosas se hacen de manera altruista y, si encima hay que pagar, los clubes lo van a sufrir bastante por no decir que algunos lo dejarán», señaló. «¿Cómo vas a hacer que tribute un chaval que está enseñando a un grupo de benjamines? La mayoría de los clubes no podrá pagarlo. Si se pone esta ley en marcha, será perjudicial. Otra cosa es que cojas una mutua y pagues un seguro a estos chavales. Creo que se debería hacer algo en esta línea. Habría que encontrar un régimen con un tipo especial para, por ejemplo, 15 monitores con el fin de que estén cubiertos, pero nada de contratos por horas ni el régimen normal de la Seguridad Social. De lo contrario, será duro para el deporte base», continuó.

La Federació de Futbol de les Illes Baleras (FFIB) planea un parón, posiblemente, la semana que viene. Antes, está prevista la llegada de Bestard a Eivissa para reunirse con los clubes. Vicente Bufí, delegado insular de fútbol, aseguró ayer que si no viene esta semana, «lo hará la próxima». «Y si no puede venir, yo comentaré lo que dice la ley, que es muy clara, y cada club deberá hacer lo que crea mejor. Bufí teme una posible «desbandada no sólo en el fútbol, sino en el deporte en general». «Solemos hablar del fútbol porque es el deporte rey, pero también afecta al atletismo, al baloncesto, al judo y a todos los deportes donde haya entrenadores, monitores, etcétera», añadió el delegado insular, para quien «la cosa está complicada».

Xicu Planells, delegado de baloncesto en las Pitiüses, fue más parco: «De momento, se ha comentado tanto en la federación como en los clubes. Se ha informado, pero no sabemos nada. Cuando salga adelante, veremos qué pasa».