Los de Elcacho se crecieron ante las adversidades. Controlaron el juego, tuvieron ocasiones y se desfondaron para que no se notara en el campo la inferioridad numérica del equipo local.

Los errores propios y ajenos condenaron a la SD Formentera a sumar su cuarta jornada consecutiva sin vencer al empatar sin goles en su domicilio ayer ante el Poblense.

Un gol mal anulado que había convertido Mourad en el minuto 21 fue el primer gran desacierto –en este caso, ajeno– que sufrieron los formenterenses. Seguidamente el fallo vino de Winde, que en el 37 dejó a su equipo con diez hombres al ver la segunda cartulina amarilla en dos faltas intrascendentes. Lejos de hurgar en la herida, el equipo visitante no inquietó en todo el partido, a pesar de afrontar más de 50 minutos con superioridad numérica.

A pesar de ello, lograron rehacerse de los malos tragos padecidos y consiguieron mandar en la medular. Los locales hicieron méritos para llevarse los tres puntos, pero pecaron de falta de acierto. Mourad (7’), Górriz (45), Brazález (75) y Ayala (90) tuvieron las más claras, pero no las lograron transformar.

La falta de pólvora dejó a los pitiusos con un sabor amargo. Pese al buen papel desempeñado, incomprensiblemente se escapaban dos puntos del Municipal de Sant Francesc.

Conjurados

Tras tres partidos sin sumar un triunfo, el equipo saltó al césped conjurado para revertir la mala racha. Antes de que rodara el balón, titulares y suplentes se unieron en una piña para aunar fuerzas y esptantar la mala suerte de las últimas fechas.

Los primeros compases del partido parecieron darle la razón al técnico. Los locales dominaban el encuentro y se acercaban con peligro al área rival. Mourad tuvo la primera gran ocasión en el minuto siete. Superó al meta rival, pero quedó sin ángulo para introducir el balón en la portería.

En el 21 llegó una de las jugadas clave del duelo. El delantero marroquí superó de nuevo a Molondro y marcó un gol legal, pero Fornès Bover anuló la jugada por una falta previa, ignorando la ley de la ventaja.

Tras este mazazo, Winde se borró del encuentro al ver la segunda amarilla en el 37. Quedaban más de 50 minutos de juego y el Formentera debía remar a contracorriente con un hombre menos.

Tras unos minutos de desconcierto, los bermellones se rehicieron e incluso olieron el 1-0. Al final del primer tiempo, un remate de Górriz no entró por muy poco.

Tras el descanso, el dominio local fue incontestable. Es más, el Poblense no llegó a chutar entre los tres palos.
Con el paso del tiempo, el cansancio hizo mella en los formenterenses y Elcacho dio entrada a Brazález, que pudo marcar en el 75, y a Noguerol, que batalló y oxigenó la medular.

Al menos, aunque no se pudo dar el asalto al liderato, se frenó a un rival directo. Con este resultado, los de Sa Pobla seguirán a seis puntos de los bermellones. Quedan las finales ante el Llosetense, el Binissalem y el Manacor.