Crisis en un Ushuaïa que enlaza tres derrotas

El cuadro melillense volvió a dar todo un espectáculo sobre su cancha de juego, en un partido en el que fue superior al Ushüaia Ibiza Voley. Los locales jugaron a un gran nivel en los dos primeros sets, aunque en el tercer parcial acusaron la citada lesión de Hugo, lo que aprovechó el equipo balear para acortar distancias (2-1). El Club Voleibol Melilla se repuso y encarriló el partido en el cuarto set, aunque se relajó en los instantes finales, pero aseguró los últimos puntos para ganar el partido.

Los dos primeros sets fueron un calco. El equipo melillense jugó un gran voleibol y puso contra las cuerdas al Ushüaia Ibiza Voley, que nada pudo hacer para parar el arsenal ofensivo de los locales.

En el primero juego, el equipo local despegó tras el empate a ocho puntos, aunque antes ya había dispuesto de una ventaja de 5-2. El visitante Ronchi, con tres aces, puso las cosas en su sitio. Sin embargo, el cuadro amarillo no pudo parar el buen juego de los de Salim Abeelkader, que destacó en todas sus líneas. El cuadro local alcanzó una cómoda ventaja de 17-12 con la que afrontó con comodidad la recta final de un set que se adjudicó por un claro 25-16.

En la segunda manga, los melillenses se marcharon en el marcador desde el inicio con cinco puntos de distancia (7-2). La buena defensa y el bloqueo hicieron mucho daño a los baleares. Sobre todo lo hizo el gran servicio de Vicente Monfort, que, además, ganó varios puntos de finta, con la que sacó de quicio al Ushüaia Ibiza Voley. Con este panorama, el Melilla se apuntó de nuevo el set cómodamente (25-18).

El tercer parcial llevaba el mismo camino que los dos anteriores, pero, tras el empate a 11, se lesionó Hugo Bravo. La lesión del atacante colombiano dejó tocado al equipo de Salim Abdelkader y los visitantes, a base de amor propio y concentración, se impusieron por 21-25.

El Ushüaia Ibiza Voley salió a la pista convencido de forzar el tie-break, pero los melillenses le sorprendieron con un 8-1 de salida. La presión jugó en contra de los de Toni Gino, que vieron cómo su oponente se marchaba en el marcador hasta el 21-13. El partido parecía que esta decantado, pero la relación la aprovechó el equipo balear para situarse en 22-20. De nuevo emergió el mejor Melilla, con un buen bloqueo, para ampliar la ventaja. Finalmente Vicente Monfort se jugó el punto de partido con una finta espectacular para dejar los puntos en casa y meter en crisis a un conjunto ibicenco del que se esperaba algo más.