Los componentes del CG Eivissa, durante una sesión de entrenamiento en el polideportivo de Sa Blanca Dona. | Toni Escobar

El Club Gimnàstic Eivissa, creado en 1991, vive una etapa de crecimiento desde que hace dos años la entrenadora Lucía Molina cogió las riendas de la entidad y aceptó el rol de presidenta. Actualmente, cuenta con 47 niñas. Entre ellas, destaca Esther L. Terrassa, que el año pasado conquistó la quinta plaza en la competición de salto del Campeonato de España de su categoría.
«Alguna otra chica también despunta, como Paola y Judit, pero además de las mayores también hay un grupo entre las más pequeñas que tienen potencial», indicó la entrenadora Gretel Castro.
Dada la limitación de instalaciones y horarios de entrenamiento, el objetivo del club se sitúa en tratar de incrementar el nivel competitivo de las chicas «dentro de lo posible», según comentó Molina.
Y es que esta casi cincuentena de deportistas sólo dispone de un tercio del parqué de Sa Blancadona en tres sesiones semanales de tres horas cada una. «Somos muchas y nos falta espacio. Lo ideal sería poder entrenar cuatro o cinco horas cinco veces por semana», apuntó la presidenta, aunque reconoció que esta circunstancia difícilmente tenga solución. «Esa es una de las diferencias con los clubes de Palma», añadió.