Tony Rominger será el padrino para la Vuelta Cicloturista a Ibiza. Los inscritos en la vuelta pitiusa tendrán la oportunidad de rodar junto a este mito del ciclismo los días 8 y 9 de octubre.

El suizo fue uno de los más grandes de la década de los noventa, el hombre que arrasaba en la Vuelta España, un escalador capaz de ganar clásicas y lucirse en las cronos más exigentes. Era un auténtico loco cuando se lanzaba al vacío en los descensos pasados por agua de los puertos asturianos, el enemigo de Indurain que más cerca estuvo de vencerle en el Tour de Francia. Gracias a esas gestas, Tony Rominger consiguió colarse en el imaginario popular de los amantes del ciclismo hace 25 años.

El exciclista profesional será un padrino de lujo para una ronda que llega a su decimosexta edición. Rominger acude a la isla por primera vez y toma el relevo de otros ilustres profesionales como el propio Indurain, con el que vivió un apasionante duelo en el Tour de 1993 –recordada es la fuga de Rominger subiendo el Tourmalet y el Aubisque que se encargaría de abortar el campeón navarro en las bajas de los dos colosos pirenaicos–. Bien podría informarse Rominger, que además de sus tres vueltas consecutivas sumó el Giro de Italia de 1995 y dos Giros de Lombardía a su currículum, de lo que le espera en las carreteras pitiusas a través de antiguos gregarios suyos como Abraham Olano y Fernando Escartín, corredores españoles que se formaron bajo la sombra del helvético en el CLAS Cajastur y el Mapei para brillar a finales de los noventa como líderes en la Once y el Kelme.