Aunque nos encontremos en la XIX edición, la competición cumple dos décadas, ya que en 199 no se celebró. Y, segun el organizador del evento, José Antonio Piqueras, vive un gran momento de salud. «Hace dos años batimos el récord con 86 equipos; el año pasado llegamos a 78 y esta vez hemos alcanzado los 81, lo que demuestra que en Eivissa hay hambre de baloncesto», comentó Piqueras.
En total son 324 jugadores inscritos entre todas las categorías, desde los equipos baby, con el pequeño Bruno, de tres años, como el más benjamín del torneo; hasta los más veteranos, como el equipo formado por el propio Piqueras junto a Domingo Chaler, Samuel Romero y el mallorquín Biel Perelló, venido exprofeso para el torneo.
Tras unos años oscuros para el baloncesto local, Piqueras atisba un renacer con la incorporación de las nuevas generaciones: «Siempre hemos tenido mucha afición y quizás han sido unos años complicados, pero en este año parece que el baloncesto pitiuso toma un nuevo aire, sobretodo en nuevas licencias». En este sentido, destaca que el torneo que organiza cuenta cada vez con más equipos de las categorías más jóvenes. «Entre minibasket, premini, iniciación y baby tenemos 30 equipos», destacó este amante del deporte de la canasta.
Y es que, si uno visita las seis pistas de sa Bodega a última hora de la tarde puede comprobar que los pequeños son los auténticos protagonistas de este torneo. Otra baza fundamental de esta competición es el fair play, pues no existe la figura del árbitro para los enfrentamientos y, a excepción de alguna ayuda de un monitor para los más pequeños. «Siempre hay algún roce, porque es deporte y es copetitivo, pero ellos se autoregulan y siempre ha funcionado muy bien», explica Piqueras.
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