Los contratiempos para Sanz empezaron antes de la competición, pues actuó mermado por un problema estomacal que le ha afectado en las horas previas. Además, durante la competición se vio perjudicado por el viento que predominó durante la jornada de ayer, que penaliza las opciones de Sanz.
Inicialmente, el pupilo de Asier Fernández firmó un discreto 24, pero pareció reaccionar en la segunda carrera con un decimoquinto lugar. En la tercera manga, volvió a ceder terreno y sólo pudo ser vigesimoprimero, cerrando su participación en su debut con la vigésimo posición en la general y a la espera de lo que pueda suceder esta tarde, cuando se celebrarán otras tres mangas.
«Con este viento, podría haber acabado entre los 15 primeros; esperemos que sople menos mañana [hoy para el lector]», expresó el regatista formenterés al término de la jornada en declaraciones que compartió a través de las redes sociales.
«No me encontraba nervioso, aunque cometí un error en la primera carrera, haciendo un mal inicio», dijo. «A este nivel, cualquier error cuesta muchos puntos», añadió, a la vez que se despedía de sus seguidores para «comer algo y estar listo para mañana [hoy para el lector]».
Así, esta tarde Sanz arrancará en la cuarta carrera en la vigésima plaza, con 39 puntos, por detrás del representante español Iván Pastor, que es decimoséptimo con 27 puntos tras hacer un decimoséptimo y un décimo puesto.
Dempsey, superior
Por otro lado, el británico Nick Dempsey se mostró intratable y firmó una jornada prácticamente perfecta, con dos primeros puestos y un segundo en la tercera prueba, liderando así la general, por delante del holandés Dorian Van Rijsselberghe y el griego Vyron Kokkalanis.
La Medal Race es el objetivo de Mateo Sanz, que hoy tendrá por delante otras tres pruebas para intentar recortar distancias y acercarse a la zona de corte.
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