El técnico del Ciudad de Ibiza, ayer en las instalaciones del Grupo Prensa Pitiusa. | D. Manau

El Ciudad de Ibiza empieza este domingo (11.30 horas en el estadio Can Misses) una nueva página en la historia del fútbol pitiuso. Conversamos con su entrenador, Ibon Begoña (Bilbao, 1973), en la previa del debut ante el Santa Catalina Atlético.

—¿Qué sienten jugadores y técnicos ante un partido que será histórico?

—Principalmente sentimos ilusión. Somos un club nuevo en la categoría y aunque los jugadores, a título individual, casi todos han pasado por Tercera, siempre es especial estrenar categoría con el club. Estamos con ganas de que llegue el momento y ver a qué nivel estamos y de qué somos capaces.

—¿Qué expectativas tienen ante un equipo a priori humilde?

—Siempre saldremos a ganar los partidos, y más en casa. Como equipo nuevo sería importante empezar bien, porque un buen resultado te da confianza y tranquilidad para seguir trabajando. Aunque sea un equipo humilde, será complicado. En Tercera, ya hemos visto a grandes equipos sufrir con algunos pequeños.

—¿Dónde sitúa el objetivo de la temporada?

—Mantener la categoría nos permitiría seguir creciendo. Luego, a nivel deportivo, a los técnicos y a los propios jugadores no se les puede cortar la ambición. Siempre hay que ser ambiciosos, pero hasta que no hayan pasado diez o 12 jornadas no veremos qué nivel tenemos. Para esas fechas [finales de octubre o principios de noviembre] espero tener la plantilla completa.

—Tienen una plantilla muy corta, ¿espera más fichajes?

—Sí, de hecho hoy firmamos a un nuevo jugador [ver página 41] y seguramente llegue otro esta misma semana. Lo ideal es empezar la pretemporada con toda la plantilla disponible y cerrada, pero no resulta fácil y estamos siendo bastante pacientes. Estamos trabajando para que quien venga nos aporte algo y mejore lo que tenemos.

—¿Con estas dos incorporaciones tendría suficiente?

—Necesitamos alguien en la banda derecha, en la izquierda y un centrocampista de corte defensivo. Además, seguramente venga un cuarto jugador, pero esperaremos a que las primeras jornadas nos señalen las carencias que podamos necesitar cubrir. Vamos con un plantilla justa para iniciar, pero calculo que en la jornada tres o cuatro ya tendremos el plantel completo.

—¿El listón de la permanencia no se les queda corto?

—No me da ninguna vergüenza decir que si podemos aspirar a lo máximo, lo haremos, porque somos ambiciosos. Después de la permanencia, el siguiente objetivo posible solo puede ser el play off, porque no es ninguna meta aspirar a quedarse a media tabla. Pero, insisto, hasta que no hayan pasado diez o 12 jornadas no veremos a qué podemos aspirar.

—La conexión con afición está en entredicho...

—Al aficionado le tenemos que dar. Ahora no es momento de pedirle nada. Todo el mundo sabe que la afición de Vila está un poco desencantada con las últimas experiencias y nosotros ahora estamos para dar y ofrecer al público un equipo que le pueda ilusionar. Evidentemente somos un club nuevo que tiene que crear su masa social, cosa que haremos poco a poco. No estamos para ocupar el espacio de nadie, sino para crear el nuestro propio. Esto se consigue muy poco a poco e ilusionando a la gente. En esto todo el mundo tiene mucha prisa, excepto nosotros.

—Aunque no es lo mismo, Can Misses vibró en la fase de ascenso...

—La respuesta de la afición fue increíble, superó todas nuestras expectativas, pero semana a semana ya se verá. Nuestro trabajo es jugar bien para que la gente se anime venir al campo.

—En la zona noble de la tabla, ve pocos equipos o un grupo numeroso?

—Considero que los favoritos son Formentera, Peña Deportiva y Llosetense. Son los que tienen mayor potencial, a priori. Estos tres seguramente estarán entre los cuatro primeros, casi con toda seguridad. Lo nuestro será la permanencia, sin renunciar a nada.