Cristina Ferrer aterrizó ayer en el aeropuerto de Ibiza con la medalla de plata por equipos conseguida en el Campeonato del Mundo, celebrado en Austria a lo largo de la semana pasada. La ibicenca, arropada por Irene Colomar y Fernando Pérez, ya ha dejado atrás la amargura que supone perder una final y valora como se merece la gesta conseguida. «Esta plata sabe a gloria», confesó.

«Te da rabia perder la final, porque era contra Francia y ya le habíamos ganado en Toledo. Sabíamos que podíamos ganar perfectamente, pero lucharon mejor y es lo que hay», comentó la deportista del Samyd, que no quiso obviar su actuación en la competición individual: «Ahora mismo, tanto la plata por equipos como el séptimo puesto individual saben a gloria. En otro deporte, un séptimo lugar es la bomba aunque no le demos importancia».

Con todo, Cristina Ferrer reconoció que estuvieron dándole bastantes vueltas a lo sucedido en la final «durante la noche del sábado, que fue bastante dramática». «Desde que nos clasificamos para la final el viernes, sabíamos que ya teníamos la plata y, por tanto, no teníamos nada que perder. La cuestión era ir a ganar. Al no salir las cosas, pues se comentaba lo clásico: ‘Aquí podría haber hecho tal’. Al final, es un juego y el nivel es altísimo, así que puede pasar. El sábado lo veíamos todo supernegro, pero a partir de ahí ya vamos valorando lo que hemos hecho, que es muy grande», explicó.

Sobre si se trata de su mayor éxito deportivo por encima del bronce europeo individual, comentó que «son cosas diferentes». «A nivel de equipos, sin duda es lo mejor. Es uno de mis mayores éxitos. No sé si es el mayor, pero sí de los mayores», señaló la karateca, que ya tiene en mente superar este logro dentro de dos años en el próximo Mundial: «Ahora toca intentar quedar campeonas del mundo en la siguiente cita. A nivel individual, quiero conseguir una medalla. Se me escapó el pase al bronce por poco, por un fallo, y es algo que fastidia».

Cristina Ferrer se tomará ahora un descanso en la isla: «Estaré dos semanas sin hacer nada de karate como alumna.

Las clases que yo imparto, lógicamente, siguen adelante. Ahora toca descansar, organizar mi vida y volver al mundo real, porque llevamos casi un mes fuera». Así las cosas, la ibicenca ni siquiera puede adelantar cuáles serán sus próximas competiciones. «Supongo que el Open de París, pero la verdad es que ni lo sé», afirmó al respecto la subcampeona del mundo.