El Ciudad de Ibiza ya sabe lo que es perder en el estadio de Can Misses en Tercera División. El equipo de Ibon Begoña sucumbió en el derbi ibicenco de la jornada contra la Peña Deportiva, que aprovechó así el revés del Poblense en Formentera para recortar distancias con respecto al primer clasificado. Los pupilos de Dani Mori tuvieron que sudar más de lo esperado para noquear a un City que tuvo un punto metido en el bolsillo hasta el minuto 75.

Las cosas no tardaron en ponerse bien para la Peña Deportiva, que al cuarto de hora de juego ya mandaba en el marcador. Winde aprovechó a la perfección un centro de Luis para cabecear el esférico a la red. Hasta entonces, cada equipo había dispuesto de una ocasión. La primera fue para Brian, con un centro-chut que se marchó fuera. También salió desviado un posterior disparo de Piquero en un encuentro que arrancó con chispa.

Pese al gol, el City no tiró la toalla. De hecho, Andrés estuvo a punto de marcar un golazo en la siguiente acción tras enganchar el balón a bote pronto desde fuera del área. Las facilidades para encontrar portería desaparecieron a partir de entonces. Los dos conjuntos cerraron mejor los espacios y sólo en acciones individuales, como las que protagonizaba Terán, parecían poder romper la monotonía.

Los peñistas pudieron poner tierra de por medio pasada la media hora de juego en una segunda jugada que Rubén Martínez, solo en el área pequeña, mandó fuera. Los locales imprimieron una marcha más a su juego en la recta final. Ramos, con un cabezazo manso tras un pase largo de Cardona, dio el primer aviso. Finalmente, Brian, sobre la bocina, regateó al portero y marcó tras disparar desequilibrado por Ángel, que se jugó la expulsión al haberle hecho falta en la acción. Poco antes, Luis había estrellado en el larguero un lanzamiento de falta directa. Curioso. Del 0-2 se pasó al 1-1, resultado con el que se llegó al descanso.

En la segunda mitad, Terán continuó insistiendo en la búsqueda del gol. Apenas habían pasado dos minutos cuando se quedó solo contra el portero, que le sacó el balón al estilo Iker Casillas contra Robben en la final del Mundial que ganó España. El andaluz volvió a probar fortuna desde la frontal en el minuto 58, pero el balón salió excesivamente alto.

El City no dio señales de vida hasta el minuto 71, en un zambombazo de Ramos que despejó Ángel. Poco después, los peñistas desequilibraron la balanza. Dani Mori dio entrada a Ramiro por Piquero, que no ocultó su enfado por el cambio y propinó un golpe a una silla del banquillo. La sustitución no pudo ser más rentable, pues, mientras el cántabro aún acaba de acoplarse al banco, el extremo ejecutó el saque de esquina que supuso el 1-2, obra de Pando con un cabezazo inapelable.

Los de Ibon Begoña desaparecieron entonces por completo. Ortiz se plantó solo ante el portero, pero fue desequilibrado en el área por el último defensor. El árbitro no señaló nada para sorpresa de casi todos. De todos modos, el tercer tanto no tardó en llegar. Terán recortó a Rosa en el vértice del área y lanzó un misil al segundo palo. Gol, no; golazo. De ahí al final, lo único reseñable fue el regreso de José Luis, que saltó al terreno de juego en el minuto 86 en sustitución de Cristian Terán, el mejor del partido.