Cristina Ferrer, en tierras turcas.

Cristina Ferrer se quedó ayer sin medalla en el Campeonato de Europa individual, dentro de la modalidad de kumite y en el peso de menos de 55 kilogramos. La karateca ibicenca tenía marcado como objetivo pelear por las medallas, pero un mal día y un sorteo poco benévolo le impidió llegar a las rondas de podio.

La deportista del Samyd inició la competición contra la bielorrusa Irina Sharykhina, a la que superó por 1-0. Acto seguido le tocó bailar con la más fea, la vigente campeona mundial: Emilie Thouy. La francesa, que el año pasado había logrado además dos medallas, una de oro y otra de plata, en citas de la Premier League, superó a la pitiusa por 2-0.

«He perdido otra vez con ella –la anterior fue en el Mundial–. Ha sido fallo mío», dijo la karateca española, que hoy buscará la medalla en la competición por equipos junto a sus compañeras Rocío Sánchez, Cristina Vizcaíno y María Torres.