Una imagen del billarista ibicenco durante el Campeonato de Balears.

Jonás Souto debutó ayer en el Campeonato de Europa de pool de la categoría pupil (sub 17), que se celebra en Leende (Holanda) y lo hizo con un sabor agridulce. El jugador del Club Billar Eivissa-Ilusions Pool se impuso en la primera ronda al holandés

Yannik Pongers por un apretado 6-5, pero luego cayó contra el bielorruso Uladzislau Shopik por 4-6 en la modalidad de bola-10, por lo que tendrá que buscar hoy la clasificación al cuadro final por la parte de perdedores.

El representante ibicenco acusó los nervios propios del debut en la competición y no mostró su mejor juego. Fue capaz tanto de entronerar bolas de altísima dificultad como de fallar algunas obvias, impropio de su nivel. A pesar de ello regateó el nerviosismo para sacar adelante el siempre complicado primer enfrentamiento tras remontar un 4-2 ad- verso contra el jugador tulipán.

En la segunda ronda comenzó como un tiro. Se puso pronto 3-1 arriba, demostrando sus grandes dotes como billarista, ésas que le han llevado a revalidar el Campeonato de España júnior de bola-9 y bola-8, conquistar el Campeonato de Balears absoluto de bola-9 y bola-10, y finalizar quinto en el nacional absoluto de bola-9. Pero en una cita continental no existen las cenicientas y su rival fue capaz de voltear el marcador para meterse en las eliminatorias directas de dieciseisavos de final por la parte de ganadores.

Jonás Souto tendrá que disputar hoy, a las 10.30 horas, la batalla por el pase a dicha ronda contra el suizo Silvan Starkermann, que venció al francés Paul Vilches-Pardo (6-2). Ya no hay margen de error.