Un año más el Club Nàutic Sant Antoni (CNSA) celebró ayer con gran éxito de participación una nueva edición del popular y ya tradicional Día de la Piragua.

La prueba, de carácter no competitivo, fue organizada por el Club Nàutic Sant Antoni, en colaboración con el Ayuntamiento de Sant Antoni y Kayak-Ibiza, y contó con un total de 128 participantes de todas las edades.
Enrique Mas, director técnico del Área Deportiva del CNSA, comentó sobre la actividad que «hemos conseguido tener un buen número de participantes, porque aunque ha habido años en los que hemos tenido bastantes más, conseguir pasar de cien es ya todo un éxito».

«Se trata de un acontecimiento que es muy divertido para toda la gente y en el que los participantes se lo pasan muy bien porque tienen la oportunidad de salir a disfrutar al mar, de navegar. No es una actividad muy difícil, al contrario, es un día muy popular con participantes de todas las edades y por eso hacemos que la travesía sea lo más fácil posible. Hay que gente que repite y que viene cada año, pero también hay bastante gente nueva que disfruta de esta experiencia por primera vez», destacó el director técnico del Área Deportiva del CNSA.

Los numerosos palistas inscritos en la actividad disfrutaron de una magnífica jornada lúdica y deportiva recorriendo por el mar en sus kayaks y piraguas una bonita parte del litoral en una travesía que comenzó a las 11 horas desde las propias instalaciones del Club Nàutic Sant Antoni, con rumbo hacia Cala Gració. Los piragüistas fueron escoltados en todo momento por distintas embarcaciones de Es Nàutic y mantuvieron un buen ritmo de navegación.

Al arribar a Cala Gració los palistas accedieron por el canal de embarcaciones y allí en sus dunas disfrutaron de un sabroso tentempié para reponer fuerzas antes de emprender de nuevo el camino de vuelta hacia Sant Antonio. Poco después pusieron nuevamente rumbo hacia el puerto, al que consiguieron llegar alrededor de las 13 horas.

Luis López, de 28 años de edad, explicó que «ha sido mi primera vez y la verdad es que la experiencia me ha gustado un montón. Aunque al final he acabado un poco cansado ha sido muy divertido. Ha habido muy buen ambiente y todo estaba muy bien organizado».

Lali Torres, una residente de 45 años, indicó que «me ha parecido una jornada genial. Es la primera vez que vengo a hacer esta travesía y te puedo decir que no será la última. El año pasado hice un curso de kayak en Figueretas y me aficioné enseguida porque me gusta mucho el mar y salir a hacer excursiones con la gente por la isla».

Alejandro Hortensius, un joven ibicenco de 11 años, apuntó que «éste es el tercer año que participo en esta actividad. Se conoce a mucha gente y te los pasa muy bien. Recomiendo a todas las personas que la hagan alguna vez porque es una experiencia que merece la pena».

Así las cosas, tras recuperar fuerzas, una vez que todos desembarcaron en las dependencias portuarias, se celebró un sorteo de 70 regalos entre todos los participantes, entre los que destacó un imponente kayak a estrenar, que la fortuna quiso que se llevase José Luis ‘Pepín’ Valdés.

El Día de la Piragua, que se ha consolidado ya como todo un clásico del deporte pitiuso, mezcla diversión y aventura para regatistas y aficionados de toda la isla, contando incluso con la participación de familias enteras. Se trata de una actividad que forma parte del programa de las fiestas de Sant Bartomeu y que tiene como principal objetivo fomentar el deporte en el mar entre los jóvenes y los aficionados pitiusos.