Vandalismo puro y duro en Puig d’en Valls. Eso, o muchas ganas de hacer daño, es lo que se denuncia desde el CD Puig d’en Valls, después de que el pasado viernes, antes de empezar con sus entrenamientos, se encontraran con que el césped de su campo de fútbol presentaba unas lamentables condiciones.

«Había muchos clavos tirados en muchas zonas del terreno de juego, algunos de ellos estaban colocados en punta y con silicona por el césped, por los banquillos y en los aspersores. La verdad que es indignante que haya gente así. Tuvimos la suerte de no lamentar ningún accidente, al darnos cuenta rápidamente de cómo estaba todo, pero ya había algunos niños pequeños correteando por el campo», denunciaron desde el propio club de la población santaeulaliense.

Asimismo, desde la entidad deportiva vallenca, mostraron su malestar por lo acontecido y señalaron que «sólo esperamos que se empiece a vigilar la zona, porque no es la primera vez que pasan estos actos vandálicos. Queremos agradecer a los niños del equipo prebenjamín, que perdieron gran parte de su entrenamiento, al benjamín y al alevín, así como a algunos papás y mamás, a Toni Marí y a un operario, por ayudarnos a recoger y limpiar la zona. No os podéis imaginar lo indignados que estaban nuestros chicos».