Una acción del partido entre el HC Eivissa y el Sant Joan.

Test de altura para el HC Eivissa. El equipo ibicenco, que ha realizado un arranque más que esperanzador, visita la cancha de uno de los dos únicos conjuntos que se mantienen invictos tras cuatro jornadas: el Almoradí.

El cuadro naranja, con tres victorias y una derrota, pretende convertirse en el primer verdugo del colíder. Para ello cuenta con todos sus hombres disponibles a excepción de Alberto, que no viaja por motivos personales.

Eugenio Tilves, entrenador del HC Eivissa, considera que el partido será «muy duro». «Tienen muy buena defensa, un 6-0 de mucho peso. Debemos tener paciencia para tratar de buscar el lanzamiento», explicó el técnico, que apuntó que la idea es «seguir trabajando y basarnos en la defensa, que es nuestro pilar, para tratar de llegar vivos al final del partido». «A ver si podemos sacar algo positivo», sentenció.