Bonilla pierde la pelota ante un jugador del Cornellà en una acción del primer tiempo.

Formentera Formentera 1

U.E. Cornellà UE Cornellà 1

Segunda B - Grupo III | Jornada 26 | 18/02/2018 12:00 | Final

El Formentera sigue jugando con fuego. El equipo rojinegro empató ayer contra el Cornellá (1-1) y continúa sin saber lo que es ganar en lo que va de año. Al menos, eso sí, puso fin a una racha de seis partidos consecutivos sin marcar. Lo más curioso es que el primer gol de 2018 llegó en propia puerta.

Al contrario que en partidos recientes, el conjunto de Juan Arsenal fue el dominador del choque. Es más, incluso tuvo varios acercamientos de peligro, suficientes como para haber visto puerta. El primero de ellos se produjo al filo del primer cuarto de hora, cuando un buen centro de Juan Antonio lo cabeceó mal Gabri y el portero atajó el balón sin problemas.

El cuadro catalán no falló el primera ocasión que tuvo. Un par de minutos después, Mújica recibió un pase largo y aprovechó el doble error de Javi Rosa y Marcos Contreras, a quien el balón le superó por debajo de las piernas, para romper el cerocerismo. León trató poco después de poner tierra de por medio con un disparo raso tras una apertura de Mújica al costado izquierdo, pero el meta local metió las manos abajo para despejar la pelota.

Una vez superado el bajón anímico que supone cualquier gol, el Formentera se puso el mono de trabajo en busca de la igualada. Juan Antonio metió un buen pase interior a Bruno, pero éste recibió una carga legal y se quedó sin opciones de remate.

Poco después, de nuevo el delantero andaluz habilitó a un compañero, en esta ocasión a Gabri, que estrelló su disparo en el cuerpo del meta. El catalán se había quedado completamente solo y había desperdiciado una ocasión inmejorable para empatar. Ésta fue la última oportunidad destacable de una primera parte en la que, además, se produjo la lesión de Bruno a los 33 minutos. Agus ocupó su lugar.

Tras el descanso, los de la pitiusa sur incrementaron su acecho sobre la meta del Cornellà. Juan Antonio, a pase de Bonilla, desperdició la primera ocasión para empatar a los tres minutos. Acto seguido, el citado defensa conectó un cabezazo peligrosísimo que el portero atajó con una espectacular estirada.

Dicen que tanto va el cántaro a la fuente que, al final, se rompe. A los diez minutos de la reanudación, Nando Quesada botó una falta lateral y León desvió la pelota hacia su propia portería. Sant Francesc, por fin, celebraba un tanto, aunque fuera un autogol. De ahí al final hubo poco que remarcar. Un chut lejano de Edgar que se marchó fuera y un remate de Bonilla en el segundo palo que la grada cantaba ya como gol fueron las últimas aproximaciones de un duelo que acabó en tablas, un resultado que mantiene la crisis de un Formentera inmerso en la zona de descenso.