Los más pequeños disfrutan de un cierre de curso diferente en la playa de Talamanca.

El Samyd cerró ayer el curso en playa de Talamanca con una actividad diferente. Un día que disfrutaron sobre todo los más pequeños que se pudieron dar un chapuzón al finalizar.
Ocho cinturones negros y unos 55 niños con cinturones de todos los colores se acercaron a la playa para celebrar el final de la temporada. Desde los más pequeños de cuatro años a los más mayores, pasando por la medallista de los Juegos Mediterráneos Cristina Ferrer. Todos ellos cambiaron el tatami por la arena para entrenar. Una superficie en la que sobre todo disfrutaron los niños.
El entrenamiento dio paso a una kata en el agua. Un espectáculo visual que llamó la atención de los turistas e ibicencos que estaban a los alrededores del arenal.
El colofón final llegó cuando cambiaron el karategui por le bañador y se lanzaron al mar. Allí los más pequeños se lo pasaron en grande bajo la atenta mirada de los mayores.