A la tercera va la vencida. Que se lo digan a Tita Llorens, que firmó ayer toda una gesta al convertirse en la primera mujer en cruzar a nado desde Jávea (Alicante) hasta Ibiza y en la primera persona en hacerlo sin neopreno. La menorquina completó el recorrido, de unos 90 kilómetros de distancia, en un tiempo de 36 horas y 15 minutos.

La aventura comenzó a las 07.15 horas del jueves, cuando la nadadora de 50 años se lanzó al agua desde el Cap de Sant Antoni, en Jávea. El final no pudo ser más feliz. La veterana deportista pisó tierra en sa Figuera Borda a las 19.30 horas exactas ante la presencia y los ánimos de varios amigos y turistas que andaban por la zona. En principio, la meta debía estar situada en Cala Tarida, pero finalmente se tuvo que cambiar de escenario por la fuerte corriente.

En su tercer intento por lograr una gesta inédita, Llorens empezaba su sueño con unas condiciones sensacionales, acompañada por un equipo de un juez para validar la prueba, dos patrones, un médico, cuatro nadadores y tres kayaks. El principal cambio con respecto a las dos intentonas anteriores estribaba en el cambio de sentido de su desafío. Gracias a los consejos de la Universitat de les Illes Balears y del Sistema de Observación Costera de Baleares (Socib), Tita Llorens salió esta vez desde Jávea.

En 2016, las condiciones climatológicas impidieron que pudiera completar el reto. Un radical cambio de tiempo en el mar obligó a posponer un año la empresa. En 2017, después de unas 37 horas en el agua, las corrientes la obligaron a abandonar de nuevo el sueño. Finalmente, a la tercera fue la vencida y ayer pudo cumplir el reto.

De esta forma, se convierte en la tercera persona en nadar desde Jávea hasta tierras ibicencas. En 2006 lo hizo el catalán David Meca, si bien con un traje de neopreno y con los islotes de ses Bledes como punto final. Eso sí, finalmente nadó hasta Sant Antoni. El ibicenco Juanjo Serra, que vivió el tramo final en primera persona junto a su equipo de Ibiza Blue Challenge, lo logró en junio de 2014 con llegada en Cala d’Hort.

Tita: «Sabía que podía hacerlo, que lo conseguiría»

«Ahora he cerrado un ciclo. Ya uní las islas y ahora quería unir la península con Ibiza». Éstas fueron las primeras palabras de Tita Llorens tras pisar sa Figuera Borda. «Me ha costado tres años, tres años de mucho trabajo. Yo sabía que podía hacerlo, que lo conseguiría. Siempre está la naturaleza, que es la que manda. Las otras veces no me había dejado y ésta, al menos, me ha dado un interrogante de si podía o no hacerlo y lo he hecho», explicó la menorquina, que no ocultó que «los últimos kilómetros fueron muy duros». «Había hecho 85 en 31 horas y estos últimos me han costado una barbaridad», agregó.

Sobre la noche, dijo: «Ha sido bastante tranquila. Había luna casi llena y nos ha permitido tener más luz. Las medusas no han aparecido, lo que es un punto muy importante».
La nadadora no piensa ahora mismo en nuevos retos: «No creo que haga ninguno más como éste. Haré cosas más pequeñas. Me hace ilusión proponerle a mi equipo hacer unos relevos todos juntos. Que lo decidan ellos».

Llorens quiso «dedicar esta travesía a Montserrat Tresserras, que fue la primera mujer que lo intentó y no lo consiguió hace unos cuantos años, y a todas las mujeres luchadoras que luchan por sus sueños y no se dan por vencidas».

Serra: «Esto es algo que no volveremos a ver»

Juanjo Serra, nadador ibicenco y miembro de Ibiza Blue Challenge, considera que «lo de Tita es irrepetible». «Esto es una cosa que posiblemente no volveremos a ver ninguno de nosotros, porque este cruce lo están intentado desde el año 40 y se cuenta por retiradas», explicó.