Martín y Sugrañes, del Ushuaïa, intentan bloquear un remate de Joao, del Vecindario. | Marcelo Sastre

El Ushuaïa Ibiza Vóley tuvo que sudar la camiseta para apuntarse la victoria contra el Vecindario ayer en el pabellón de es Viver. El equipo de Piero Molducci estuvo a punto de verse sorprendido por el conjunto canario, que se hizo con los dos primeros sets del encuentro.

Parecía que los amarillos tenían la mente más bien puesta en la Copa del Rey, que se disputa el próximo fin de semana en Melilla. El 19-25 y, sobre todo, el posterior 12-25 hacían temer lo peor en la pista ibicenca.

Sin embargo, los pitiusos se pusieron entonces el mono de trabajo, cambiaron el chip y comenzaron una remontada para el recuerdo. El Ushuaïa logró una máxima ventaja de cinco puntos (14-9) que supo mantener hasta el final de la tercera manga (25-20).

La igualdad fue la nota dominante en el cuarto juego, pero los amarillos lograron distanciarse en la recta final con tres puntos (23-20) que le permitieron acabar forzando el tie-break.

En la muerte súbita, los de Molducci fueron un ciclón que arrasó a su rival por un incontestable 15-9.