Pablo Alfaro posó ayer con la camiseta de la UD Ibiza en Can Misses tras su presentación. | Marcelo Sastre

«El futbolista debe disfrutar de su profesión porque es la más bonita del mundo, pero hay que tomársela muy en serio. Tienes que tener un compromiso total. Tienes que ser humilde, no eres más ni menos que nadie. Y luego está la ambición. Creo que son los tres pilares que debemos grabar a fuego». Pablo Alfaro ya habla como técnico de la UD Ibiza y lo tiene muy claro. El aragonés fue presentado ayer en la sala de prensa del estadio de Can Misses acompañado por el presidente Amadeo Salvo y el director deportivo Fernando Soriano.

En la presentación del nuevo técnico, Salvo confirmó que el interés por Alfaro viene de lejos y recordó una vez más que su objetivo «es crear una entidad y no un equipo». Antes de ceder la palabra, deseó la mejor de las suertes al nuevo entrenador y le agradeció que aceptase la oferta.

Por su parte, Soriano señaló que el exfutbolista cumple los requisitos que andaban buscando, especialmente el de «líder». «Buscábamos un líder, necesitamos liderazgo dentro del vestuario, aparte de su nivel táctico. Creemos que nos va a aportar muchas cosas y esperamos que se note en el campo», afirmó el director deportivo.

En sus primeras palabras como técnico celeste, Alfaro no se escondió y fue claro. Reconoció que el tiempo aprieta y que necesita más días para conocer a fondo la plantilla: «No es lo mismo lo que se ve desde fuera que desde dentro». «Soy un recién aterrizado, necesito un poco más de tiempo, pero sí que hay una buena plantilla y mimbres con muchas posibilidades. Hay que engranar todo para que dar el máximo rendimiento posible», añadió.

En cuanto a su estilo, Alfaro habló de equilibrio: «Cualquier equipo que no esté equilibrado está condenado a tener más problemas que soluciones. Después hay que tener herramientas en ataque. Mi obligación es adaptarme a lo que hay».

Aunque reconoció que se verán cosas nuevas mañana ante el San Fernando, no dudó en asegurar: «Creo que sería muy torpe querer cambiarlo todo en cuatro en días y no es el caso. Hay cosas muy buenas de dos cuerpos técnicos que han trabajado anteriormente y eso me lo quiero quedar porque ya lo tiene la plantilla. A partir de ahí, ir sumando y metiendo matices. Intentaremos que lo que se vea sea un poquito mejor, con todos los respetos».

Tampoco se escondió a la hora de reconocer que el objetivo es meterse entre los cuatro primeros, y que no es sencillo alcanzarlo: «Hay una certeza y es que para conseguir el objetivo de jugar el play off hay que ganar tres partidos más que los que están arriba. Es un proyecto exigente, muy atractivo y vengo con todo el ánimo de crecer con el club y ser una pieza más en el engranaje. El objetivo es ganar, pero cada día que consigamos que con nuestra tarea el club sea un poquito mejor, eso también es importante.

Por último, aseguró que su equipo siempre tiene que salir a ganar, pero que las palabras hay que reflejarlas con hechos: «A la gente se le puede decir cosas, pero ellos quieren verlo. Yo quiero dar alegrías, lo puedo decir aquí, pero hay que plasmarlo ahí fuera».