El conjunto ibicenco apretó desde el saque para matar al Unicaja en la red. Salerno, Tapia, Elvis y Sugrañes demostraron la potencia de su brazo para llevar a la victoria al equipo | Marcelo Sastre

El Ushuaïa Ibiza Vóley y el Unicaja Almería ofrecieron ayer puro espectáculo. Los dos conjuntos demostraron por qué son dos de los mejores de España y rindieron un homenaje al deporte. Es Viver vivió la mejor entrada del año y se convirtió en una caldera para llevar a los suyos a conseguir una victoria de prestigio ante los andaluces (3-2), el marcador no permite que los pitiusos se coloquen en la segunda posición de la tabla.

El duelo tuvo de todo: jugadas espectaculares, piques entre jugadores, tensión, emoción, polémica arbitral... en resumidas cuentas, un partidazo para el espectador.

Los ibicencos salieron fortísimos al parqué y tras unos primeros puntos de intercambio, empezó a abrir hueco en el marcador. Apretando a través del saque, los pitiusos convirtieron el encuentro en un bombardeo que el Unicaja no podía parar. 25-17 al término del primer parcial y sólo había un equipo en el campo.

El segundo set siguió el mismo camino que el primero. Es Viver estaba en éxtasis. Tapia, Sugrañes, Elvis, Salerno, los remates se sucedían en la red. En defensa Paquillo volaba para mantener el balón vivo. La maquinaria amarilla era perfecta. El 25-16 fue el claro reflejo de lo visto.

Cuanto todo parecía coser y cantar y que el segundo puesto de la clasificación ya estaba ahí, llegó el Almería. La gran rotación andaluza hizo que las piezas encajasen y en el polideportivo apareció otro equipo. Todo se igualó en el tercer set. Intercambio de golpes y alternancias en el marcador para llegar al 23-24 favorable a los visitantes. Una indecisión dio el parcial al Unicaja y llevó el silencio a Es Viver.

La batalla estaba servida. La cuarta manga continuó la guerra. Dos equipos muy parejos que mataban por cada balón y por cada punto. Los jugadores locales buscaban la complicidad de una grada que respondió. Igualdad máxima, 23-23, y llegó la jugada polémica del partido. El Ushuaïa pidió que el balón fue dentro, el árbitro que fue fuera. Subió el 23-24 y el set se escapó.

Con el 2-2 se llegó al tie-break y todo estaba por decidir. Los ibicencos volvieron a sacar su mejor versión y consiguieron lo que no pudieron hacer en los dos sets anteriores, alcanzar un colchón de puntos que les diera tranquilidad y trasladase las prisas a los almeriense. El 6-3 se convirtió en 9-3 para deleite de la afición pitiusa. Con el 12-5 estaba casi todo listo para sentencia, un último arreón visitante llevó el partido al 13-8. Cayó el 14 y un bloqueo del capitán Sugrañes dio el triunfo.

El Ushuaïa es actualmente el equipo más en forma de la categoría, con la de ayer, suma ocho victorias consecutivas. Los chicos de Piero Molducci llegan a la recta final en el mejor estado de forma posible y mira a un play off por el título con ganas de soñar con todo.