Ndao presiona a Rodado durante un entrenamiento de esta semana.


La UD Ibiza está obligada a romper su maldición lejos de casa. El equipo celeste, que no gana a domicilio desde hace más de tres meses, necesita imperiosamente los tres puntos en el feudo del colista, el Almería B, para mantener su posición copera. Y es que no hay que olvidar que el nuevo formato da cabida a los siete primeros de cada grupo de la categoría de bronce.

Pablo Alfaro no podrá disponer de los defensas Albizua, Verdú y Mariano, ya sea por lesión o sanción. Además, Iosu también causa baja por una fractura en un dedo de la mano. Así las cosas, a Pablo Alfaro, que lleva convocado por primera vez a Ndao, no le queda otra que apostar por una medular novedosa y situar a Gonzalo y Núñez en el eje de la zaga.

El técnico celeste no se fía un pelo de su rival. «Vamos a Almería con las orejas tiesas», advirtió el entrenador, que apuntó que su rival es «un equipo filial que, cuando lo estudias, te das cuenta que está ahí abajo por algo, pero no es un equipo desahuciado ni se deja llevar». «Comete errores de filiales, pero con el balón tiene criterio, mecanismos y sabe lo que quiere», continuó.

El preparador de los unionistas destacó también que jugarán «en un estadio de Primera, un escenario fantástico». En cuanto a las opciones de dar minutos al recién repescado Ndao, dijo: «Ahora ya es uno más de la plantilla. Tiene ritmo de competición de Tercera, pero lo tiene. Es uno más y claro que podemos contar con él».