Rodado presiona a un defensor del Rayo Majadahonda durante el último encuentro disputado en casa. | T. Planells

Cuando algo funciona es mejor no tocarlo. Es una máxima que no todo el mundo pone en práctica, pero que suele dar resultado. Raúl Casañ sí lo hizo y decidió dar continuidad frente al Atlético de Madrid B (1-3) al bloque que ganó al Real Oviedo B (4-3).

El plan salió a la perfección y a los 10 minutos Fraile ya había anotado el primer tanto. El conjunto de Santa Eulària está sorprendiendo en este arranque y, aunque vio como le empataron el encuentro, consiguió hacer dos nuevos goles en la segunda parte para llevarse la victoria.

Los ibicencos suman dos de dos, es decir seis puntos que les permiten ser líderes de la categoría. Al final, esta posición no deja de ser una anécdota pues el objetivo real de este club no es estar peleando con los primeros por el ascenso. Lo que sí es un dato a tener en cuenta, es que los seis puntos son la mitad de los conseguidos hace dos temporadas en toda la primera vuelta. Por aquel entonces, el equipo de Dani Mori, actual entrenador del Langreo, llegó a navidades con solo 12 puntos, dos victorias y seis empates.

Además, solo había marcado 12 tantos, mientras que esta temporada son ya siete los goles conseguidos. La falta de gol fue el principal problema que tuvo la Peña en su última andadura en el fútbol de bronce y parece evidente que con la calidad del equipo actual de tres cuartos de campo para arriba, este curso los tantos seguirán llegando.

Otro aspecto a tener en cuenta es el crecimiento de algunos jugadores que ya estaban en aquella temporada. Fran Núñez ha dado un salto de calidad y esta temporada, de momento, es el pichichi con tres goles.

Otra cara en Can Misses

Tras el tropiezo de la primera jornada en Canarias ante Las Palmas B (3-2), la UD Ibiza ofreció una mejor imagen ante el Rayo Majadahonda. Ante uno de los cocos de la categoría, los celestes hicieron un partido muy serio para acabar llevándose el encuentro por 2-0.

Alfaro apostó por el mismo bloque, con la excepción de Mariano que entró en lugar del sancionado Rubén. El técnico confió en que si se corregían los errores puntuales de la primera jornada el rendimiento sería otro. Así fue.

Además, mostró su talante y siguió confiando en Germán en la portería, algo que dice mucho de un Pablo Alfaro que conoce el mundo del fútbol y que sabe que señalar a un portero por un error grave, puede minarle la moral. Eso sí, dejó claro que este año los dos guardametas tendrán minutos.

En cuanto al juego del equipo, hay cosas en la que se tiene que seguir trabajando. Se echó de menos una mayor profundidad en las bandas. Kike López muestra velocidad, mucho trabajo e intensidad, pero le falta el uno contra uno. Con la entrada de Raí, los de Vila mejoraron en ese aspecto.

Por otro lado, Alfaro ya tiene su otro nueve con la llegada de Mendoza, pero lo cierto es que si Rodado sigue haciendo de las suyas, será difícil que lo quiten. El punta no se dejó ver demasiado a lo largo del encuentro, pero en el segundo gol hizo una de esas jugadas por las que valen pagar una entrada.