Tur comentó ayer que «la preparación está yendo bastante bien». «Me estoy encontrando a gusto entrenando con el calor y por la noche», agregó al respecto. Eso sí, no ocultó que «al principio se hacía un poco raro, sobre todo por los cambios horarios». «Al final te vas acostumbrando. Lo que hemos hecho es retrasar todo el horario. Nos levantamos muy tarde, desayunamos más tarde e intentamos descansar lo máximo posible durante el día para estar bien frescos por la noche», explicó.
El ibicenco, eso sí, no ocultó que «nuca había hecho eso de salir a entrenar a las once de la noche». «Te cuesta aguantar hasta última hora del día para entrenar y tienes que dar tu cien por cien. Tampoco es fácil conciliar el sueño después de entrenar de noche, porque tienes el cuerpo y todos los músculos activados. No es el antes, sino el después lo que se hace difícil, porque al día siguiente toca volver a entrenar», expuso.
Sin problemas
Pese al drástico cambio al que se ha visto sometido, el pitiuso no ve perjuicios por ninguna parte: «Creo que no me perjudica el horario, ya que hemos hecho una buena preparación durante los últimos dos meses y medio para adaptarnos al calor y competir de noche. Espero que no sea un problema». Es más, entrenar en Almería también está siendo beneficioso, ya que su climatología es muy similar a la que encontrará en Doha.
En cuanto a sus aspiraciones en la cita mundialista, indicó que sería todo un sueño finalizar en el top ten, una meta muy complicada. «Si quedase entre los 16 primeros ya sería una buena actuación. Acabar entre los diez mejores sería increíble, lo mejor», dijo al respecto. «Actualmente voy en el puesto número 40 del ranking, pero soy bastante optimista porque he entrenado bien y creo que puedo quedar entre los 16 primeros si me sale salen muy bien las cosas y entre los diez si hiciera una gran actuación», sentenció.
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