Marc Tur posa con la ciudad de Doha al fondo.

Marc Tur Picó (Santa Eulària, 30/11/1994) se convirtió el sábado en el tercer ibicenco en participar en un Mundial de Atletismo. Lo hizo en la prueba de los 50 kilómetros de Doha en la que finalizó en la decimonovena posición. El atleta de la Peña Deportiva cierra la temporada con esta experiencia mundialista, pero ya tiene los ojos puestos en Tokio 2020, la próxima gran cita. Eso sí, primero le toca descansar.

—¿Qué tal su primera experiencia mundialista?
—Cuando llegas aquí te das cuenta de todo el trabajo que lleva estar en un Mundial. Yo pensaba que había hecho buenos entrenamientos y que llegaba en muy buenas condiciones, pero te das cuenta que hay que entrenar más y que hay que coger experiencia, que es lo que te da la seguridad.

—¿Está contento con el puesto? Las condiciones no eran ni mucho menos las mejores.
—Pues no del todo. Yo quería estar entre los 16 mejores y quedé decimonoveno, así que no estoy del todo contento. Sí que estoy feliz por acabar un competición en la que hubo momentos en los que pensé que no iba a acabar porque las condiciones fueron muy duras. No parabas de ver a gente retirándose y en camilla... era desolador. Fue duro.

—Con tanto calor ha tenido que hacer una preparación atípica.
—Sí, ha sido bastante atípica. Hemos tenido que entrenar en condiciones de calor, usamos cámaras del ejército para recrear las condiciones, que yo creo que al final no fue suficiente para competir aquí. También tuvimos que hacer entrenamientos nocturnos para adaptarnos al horario de la carrera y eso nos hizo cambiar nuestros horarios de vida normal.

—Un Mundial a finales de septiembre indica una temporada excesivamente larga.
—Sí, ha sido demasiado larga. Normalmente acabamos sobre agosto y este año hemos empezado en noviembre como siempre, pero hemos acabado en octubre. Se hace extremadamente larga.

—Si dejamos todo eso a un lado, ¿con qué se queda de este mundial?
—Pues con la experiencia de estar peleando por ser el mejor del mundo. Es una sensación muy emocionante. Nunca había estado en un campeonato de estas características y es impresionante. La organización, el estar conviviendo con el resto de los atletas y ver que se respira ese ambiente de competitividad y de buen rollo es muy chulo.

—Hablando de otros atletas, increíble lo de Chuso García Bragado. ¿Cómo se explica que con 49 años acabe los 50 kilómetros en plaza de finalista?
—La verdad que es increíble. Yo cuando llegué a meta y le vi, le felicité y le pregunté que cómo lo hacía. Es asombroso llegar a los 50 años y quedar octavo, pero se sabe que Chuso, con toda su experiencia, cuanto peores sean las condiciones mejor sabe aprovechar la carrera.

—Bueno, pero usted es aún joven para esa distancia.
—Sí, pero más que joven es que solo llevo dos años preparándome exclusivamente al 50 y aún necesito muchos kilómetros, ahora creo que ya voy teniendo una buena base, pero al principio me costaba.

—Volviendo al Mundial. Está habiendo muchas críticas por celebrarlo en Doha. El calor, la humedad, los estadios vacíos, los precios son caros... Desde dentro, ¿cómo lo viven los atletas?
—El calor y la humedad ya se sabía y ya nos habíamos quejado hace tiempo, sobre todo los marchadores y los maratonianos, pero no había posibilidad de cambio. Había que acatar las condiciones si queríamos competir en el Mundial. En comparación con el de Londres, ha habido un descenso brutal de público. Deja bastante que desear porque no se ve la gente que suele haber en un Mundial o un Europeo.

—Y Doha ¿qué tal? Ha tenido tiempo a hacer algo de turismo?
—Nada, esta tarde –ayer para el lector– empezaré a hacer algo. Los días de antes de la competición fueron de concentración y entrenamientos, y ayer fue de recuperación completa. Hasta las siete de la tarde no fui capaz de dormir, aunque al hotel llegué a las siete de la mañana. El dolor de piernas y las molestias de la prueba no me dejaban conciliar el sueño.

—El próximo año, Tokio 2020. Está claro que sueña con estar allí.
—Lógicamente la próxima temporada será dedicación plena para estar en los Juegos Olímpicos. Creo que puedo conseguirlo, llevo dos años mejorando mi marca y este año será el más importante de todos. Lo veo factible y creo que estaré en esos Juegos tan deseados.