Los jugadores del Ushuaïa Ibiza Vóley celebran un punto durante un partido de la presente temporada. | Toni Planells

El Ushuaïa Ibiza Voley recuperó ayer la sonrisa. El equipo amarillo superó al líder invicto de Superliga masculina, el Textil Santanderina, por un contundente 0-3 y rompió así una racha de dos derrotas consecutivas (Río Duero Soria, a domicilio, y Unicaja Almería, en casa). A pesar de que los santanderinos marchaban primeros tras la celebración de las tres primeras jornadas, lo cierto es que su primera posición era algo prácticamente casual, además de inesperado. De hecho, los ibicencos se encargaron de patentarlo con un triunfo por la vía rápida.

Los dos primeros sets fueron prácticamente un paseo para los jugadores visitantes. Poca historia tuvieron. Cuando los de Piero Molducci apretaron el acelerador, minimizaron a su adversario al máximo.

El 18-25 de la primera manga habla por sí solo de la diferencia entre uno y otro. Los pitiusos se mostraron mejores en todas las facetas del juego. Anotaron cuatro saques directos por ninguno de su rival y cosecharon más puntos tanto en ataque como por errores ajenos que su contrincante.

El segundo juego fue más de lo mismo. Es más, la renta del Ushuaïa Ibiza Vóley llegó a ser mayor al vencer por ocho puntos (17-25). Las fuerzas se igualaron en el saque, con un ace por bando, pero los ibicencos se mostraron más certeros en la producción ofensiva con 13 puntos de ataque por diez del Textil. Además, su bloqueo, que no estaba funcionando demasiado en este arranque liguero, le aportó cuatro tantos clave en el desenlace.

El tercer juego sí estuvo mucho más igualado. Con todo perdido, el cuadro local se sacudió los complejos y plantó batalla a un Ushuaïa Ibiza Vóley que tuvo que emplearse al máximo para cerrar el partido con un 23-25 que supuso el 0-3 definitivo. De esta forma, el Ushuaïa Ibiza Vóley sumó tres nuevos puntos antes de afrontar dos partidos de altos vuelos ante el CV Teruel y el Urbia Palma.