Los de Santa Eulària probablemente jugaron el domingo su mejor partido de la temporada y no ganaron. La efectividad de otros días no apareció y todo el mundo se marchó a casa con la tristeza en el rostro. Bueno, todos no. Los gallegos se fueron más que felices con el punto cosechado en el Municipal de la Villa del Río.
El partido contra el Racing de Ferrol dejó muchas cosas buenas para el análisis. La más significativa la irrupción de Jordan. El extremo jugó como titular por primera vez y dejó una actuación descomunal. Veloz, vertical, con desborde, fue un dolor de muelas para la defensa gallega. También llamó la atención el recado que le dejó Raúl Casañ en rueda de prensa, explicando por qué no había tenido más minutos hasta la fecha.
En defensa, Copete jugó en el lateral izquierdo y cumplió sobradamente. Tiene calidad para aburrir y saber estar. Además, Casañ recuperó a Pipo, lo cual es una muy buena noticia.
En cuanto al juego del equipo, probablemente haya sido el mejor encuentro del año. Crearon ocasiones de sobra para ganar y sólo concedieron dos. El único pero que se le puede poner al conjunto en este encuentro es la acción del gol. No se pueden quedar todos estáticos esperando a que el árbitro pite falta.
Por otro lado, esta semana se anunció la baja de Crespo. El centrocampista se va por «motivos personales». La Peña pierde a un jugador de un gran nivel. Su etapa estuvo marcada por las lesiones que le frenaron el curso pasado cuando era uno de los mejores futbolistas de la plantilla.
Se salvó un punto
Tampoco tuvo suerte la UD Ibiza en su visita a Las Rozas. Los ibicencos fueron superiores, pero empataron (1-1) y gracias. El gol llegó cuando parecía que todo estaba perdido y al final la sensación es que el punto es bueno.
El partido, después del tropiezo en la anterior salida, se preveía como clave. Alfaro puso lo que se empieza a ver como su once tipo. Varió la portería y recuperó para el centro de campo a Núñez, jugador que alcanzó los 50 partidos con la camiseta celeste. El resto volvió a ser lo habitual con un Pep Caballé que se ha ganado el puesto a base de sacrificio y trabajo. Se mata a correr en todos los encuentros.
En el aspecto futbolístico, los de Vila fueron mejores. Merecieron más, pero un gol de penalti a los pocos minutos de juego puso el encuentro cuesta arriba. Se complicó un poquito más con la tarjeta roja. Sorprende que a un jugador como Gonzalo se le fuese la cabeza con una entrada tan a destiempo en una zona intrascendente. Al final, el mejor hacer de los celestes se vio recompensado con un penalti que sirvió para empatar.
La UD Ibiza perdió una oportunidad de acercarse al primer puesto. El empate a efectos clasificatorios no cambia demasiado el paisaje. Los celestes seguirán en la tercera posición una semana más y tendrán que hacer bueno el punto el próximo domingo en Can Misses ante el Marino de Luanco.
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