Raúl Casañ da instrucciones en la banda de Santa Eulària. | Toni Planells

«Estoy contento y orgulloso de los jugadores porque han estado a un nivel que nosotros tenemos que tener en cada partido. Este es el nivel de la Peña. De ahí no se puede bajar y, pese a estar a este nivel, no hemos podido ganar porque hemos jugado contra un buen equipo de Segunda como la Ponferradina». Raúl Casañ se mostró así muy satisfecho con el trabajo de su equipo pese a la derrota.

Al ser cuestionado por si lo peor que podía pasar era perder en la prórroga, se resignó: «Son cosas del fútbol. Sabíamos que podía pasar. Sí es verdad que los 30 minutos de prórroga nos pueden pasar factura, pero de aquí al domingo queda mucho. Seguro que los chavales se recuperan y competirán».

Sobre las dos clarísimas ocasiones que tuvieron Borja Navarro y Fran Núñez, señaló: «El fútbol es así. En la de Borja, al portero le da en el pecho. Y la de Fran Núñez la tiene que marcar. Por eso estamos sufriendo en muchos partidos, porque no marcamos las ocasiones que tenemos».

En su discurso, incidió en el buen trabajo de los suyos: «Me quedo con que los chavales, un equipo que el año pasado estaba prácticamente en su totalidad en Tercera, han competido a nivel de Segunda A y han podido ganar la eliminatoria».

Casañ no quiso hablar demasiado del árbitro: «Yo la jugada de la expulsión no la veo. El jugador me dice que no es falta. Si la ha pitado pues no puedes hacer nada. El árbitro tiene que decidir. Yo no creo que pite a favor ni en contra de nadie. Al árbitro hay que dejarle tranquilo».

A la pregunta de si las dos derrotas seguidas pueden afectar al derbi, fue contundente: «El partido lo afrontamos igual. Cuando ganábamos no éramos unos fenómenos. Lo que sí que pasa es que, cuando pierdes, aparecen las ratas y las cucarachas. Nosotros estamos igual cuando ganamos y cuando perdemos». «Queremos ganar siempre. Cuando perdemos, aparecen las ratas y a esas hay que darles fuerte en la cabeza», concluyó.