Colau dispara a portería rodeado de contrarios en la acción que supuso el 2-0. | Marcelo Sastre

El CD Ibiza sumó ayer los tres puntos tras superar al Manacor (2-0) en un encuentro en el que lo mejor fue el resultado. El encuentro fue lento, apático, y solo un par de fogonazos en forma de golazo rompieron la monotonía en Can Misses.

Los rojillos salieron con poco ritmo. Querían tener el balón, pero las transiciones lentas no inquietaban a un Manacor que plantó una línea de cinco atrás y cerraba los espacios. Así, sin ocasiones, transcurrió el primer cuarto de hora.

En el 17, Ismael puso a prueba al portero visitante con un disparo lejano que buscaba la base del palo y que acabó en córner. Fue lo más emocionante de un partido en el que no pasaba absolutamente nada. La parsimonia rojilla no creaba ningún inconveniente al equipo mallorquín, que basculaba de un lado al otro sin ningún tipo de apuro. Media hora jugada.

Golazos
No pasaba nada y, de repente, en el 38, Moha se sacó un zurdazo al palo largo imposible para Jaume Ferrer, un gran gol que no casaba para nada con lo que se estaba viendo en Can Misses. 1-0 en el marcador. No pasó nada más en la primera parte. Descanso.

Tras el paso por vestuarios, el primer aviso fue del Manacor. Adrián disparó cruzado y el balón se estrelló contra el palo.

Hasta el 55 no llegó la respuesta. Colau tiró una buena pared con Moha y acabó golpeando el balón con violencia. El disparo se marchó por encima de la portería. Fue el aviso. Tres minutos más tarde, golazo. Colau combinó en la frontal del área y acabó soltando un zurdazo imparable. 2-0 para los rojillos.

En el 65, fue Pomar quien pudo marcar. Terán la dejó atrás y el central golpeó a portería, pero se encontró con una buena mano de Jaume Ferrer. Poco después, Arias no encontró los tres palos con un disparo a la media vuelta muy complicado que se marchó cerca de la escuadra.

Tras unos minutos de apuro, el Manacor pareció coger aire y buscó con transiciones rápidas una opción que les permitiese meterse en el partido. En el 81, Contreras salvó el tanto mallorquín.

El marcador ya no se movió y el partido fue muriendo hasta que el árbitro señaló el final. Tres puntos nuevos y una jornada más en la segunda posición para un CD Ibiza que deja dudas.