Momento del encuentro disputado el pasado 1 de julio en Can Misses.

La UD Ibiza se defendió ayer ante las acusaciones que ponían en duda la legalidad del partido de entrenamiento que disputó el miercoles contra la Peña Deportiva en Can Misses. Lo hizo a través de un comunicado que publicó en sus redes sociales.

En el mismo se recoge que se trató de un entrenamiento y por lo tanto no contó con árbitro, «ni tuvo acceso a las instalaciones nadie que no formara parte de los citados». Además, explican que para celebrar este partidillo solicitaron «todos los permisos necesarios en tiempo y forma» a la Federació de Fútbol de les Illes Balears (FFIB) y al Ayuntamiento de Vila.

Asimismo, defienden que los protocolos de seguridad se ajustaron a las normas establecidas por la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) a través de su Circular 90. Este documento regula la celebración de estos entrenamientos preparatorios para las fases de ascenso a Segunda A y Segunda B que durante estos días se están realizando en muchas ciudades del país.

En el texto también se informa de que los jugadores de las dos plantillas se sometieron a un test serológico en la víspera del encuentro, dando todos ellos resultados negativos en COVID-19. Los resultados se enviaron a la FFIB y al Consistorio. Ese mismo día, 30 de junio, la Federación balear notificó «por escrito» que no había invonveniente para disputar el partido «si se cumplían los requisitos de la Circular 90 de la RFEF».

Sin árbitro

El club celeste también quiso esclarecer a que se debía que no hubiese un colegiado dirigiendo el encuentro. Califican de «sorprendentes» las informaciones donde se afirma que la FFIB se negó a facilitar un árbitro para el amistoso debido a la falta de permiso de las autoridades sanitarias autonómicas. Aseguran que esto «es totalmente falso» «El Ibiza nunca solicitó al ente federativo balear un colegiado para su entrenamiento con la Peña», añaden.

Por último, el comunicado señala que el partido de entrenamiento contó con «la cobertura normativa, con la única autonómica publicada, para su realización a tenor del apartado VII ‘Medidas relativas a las condiciones en las que se deberá desarrollar la actividad deportiva’ del Acuerdo del consejo de Gobierno de 19 de junio de 2020, por el que se aprueba el Plan de Medidas Excepcionales de Prevención, Contención y Coordinación para Hacer frente a la Crisis Sanitaria Ocasionada por la COVID-19, una vez superada la fase 3 del plan para la Transición hacia una Nueva Normalidad publicado en el butlletí Oficial de les Illes Balears (BOIB) de 20 de junio de 2020, sino que, además, tuvo lugar observando todas y cada uno de las previsiones de los artículos 3, 5 y 6 del referido apartado VII. Como especifican los referidos puntos 3, 5 y 6 del apartado VII, se permite la organización de actividades deportivas entre grupos estables de hasta 30 personas». «Es evidente y notorio que las primeras plantillas celeste y peñista son grupos estables, y que además están controlados por los servicios médicos de cada club desde que se detectaron los primeros contagios de coronavirus en Balears», concluyen.