El Sant Jordi pasa a la final de la Copa

El conjunto jordier llevó el peso del partido en la primera parte, en la que los menorquines no tuvieron presencia alguna en el área rival. Un par de disparos lejanos sin consecuencia por parte de Alberto en los diez primeros minutos reflejaban quién buscaba el gol.

Flavio, en el minuto 20, pudo romper el cerocerismo, pero llegó forzado al segundo palo tras un centro de Maxi desde el costado derecho y la pelota se marchó fuera. Acto seguido, Dai y Manu tuvieron las más claras, pero los dos se toparon con el portero.

El Sant Jordi quería abrir la lata, pero su desacierto en los últimos metros lo impedía. En el 35, Juanan se sacó un control orientado de la chistera y un pase mágico para que Flavio penetrara por la banda izquierda y enviara el balón al área, donde el remate de Dai chocó contra un defensor. En el 41, Guiem trató de replicar haciendo la guerra por su cuenta, pero lanzó desde muy lejos al rearmarse la zaga y su disparo, además, no vio portería. Se llegó así al descanso sin goles y con un cuadro visitante que había tenido que cambiar su delantera por las lesiones de Llonga y Samu.

Tras el descanso, el Mercadal mejoró sus prestaciones. El encuentro se equilibró y ya no había dominador ni dominado. De hecho, los menorquines tuvieron la primera gran ocasión de este segundo periodo en las botas de Izan, que recibió un gran pase de Guiem y, solo en el área, lanzó un trallazo que encontró la respuesta fabulosa del portero Miguel. Paradón.

No tardó en replicar el Sant Jordi. Manu se sacó un disparo similar al de Izan en la frontal del área y Cris voló para desviar la pelota. Otra buena parada.

Recta final
El tiempo pasaba y el marcador no se movía. Payán decidió entonces dar aire fresco a su equipo con la entrada de Tanque y López por Juanan y Manu. Precisamente López, nada más entrar al campo en el minuto 70, se escapó por la derecha y puso la pelota a Dai en el filo del área, donde el centrocampista se entretuvo demasiado con el balón y acabó desaprovechando una oportunidad de oro.

Cuando la tanda de penaltis llamaba a la puerta, el Mercadal casi se llevó el gato al agua. En un saque de esquina al segundo palo, Raúl cabeceó fuera cuando el banquillo visitante ya cantaba gol. Susto y a los penaltis.

En los lanzamientos desde los once metros se llegó a la muerte súbita tras un error por bando. Miguel detuvo el disparo de Rubén, el segundo en tirar del Mercadal, y Cris hizo lo propio ante Esteban en la tercera ejecución de los verdinegros. Con 4-4 –y los visitantes lanzando primero– comenzó la ruleta rusa. En el octavo disparo menorquín, su capitán, Robert, lanzó fuera, a la izquierda del portero. Bruno tenía en sus botas la clasificación para la final y no perdonó. Así pues, este sábado, de nuevo en el Campo Municipal Kiko Serra, el Sant Jordi se jugará una histórica clasificación para la Copa del Rey contra el campeón de la Preferente mallorquina, el Cardassar.