La plantilla del HC Eivissa Safragell posa en el agroturismo que da nombre al equipo, ayer por la tarde. | MARCELO SASTRE

El HC Eivissa no quiere ser solamente el referente masculino del balonmano en las Pitiusas, sino también el femenino. Si no lo es ya, después de que el Puchi haya dejado de pertenecer a División de Plata, poco le falta. Tiene equipos en todas las categorías y un total de «entre 60 y 80 jugadoras cuando hace años la parte femenina era casi testimonial», tal y como indicó Miguel López, entrenador de las juveniles, presentadas ayer de manera oficial en el agroturismo Safragell Ibiza.

Ver en el futuro al HC Eivissa femenino en División de Plata «no es una posibilidad descabellada», según apuntó Alberto Vicente, coordinador de la base naranja. «Lo que hizo el Puchi es una cosa épica y nosotros, desde el trabajo y la humildad, intentaremos llevar el nombre del club lo más arriba posible a nivel femenino. Si nos siguen saliendo las cosas, ojalá podamos coger ese testigo de tener un equipo en categoría nacional. No vamos a poner fecha. Lo que les dije a ellas en su día es que en un margen de cinco años me gustaría jugar la fase de ascenso como cuando la jugamos hace años», dijo.

Eso sí, Alberto Vicente recordó que «el gran handicap es la insularidad». «De las chicas que hay aquí, tres o cuatro se nos acabarán yendo a estudiar fuera. Si nos respeta la curvatura de progresión, pues esperemos que sí. No ponemos fecha», comentó.

En una línea similar se pronunció Jesús Prieto. El presidente aseguró que «no hay límites». Además, se mostró satisfecho por la progresión de la rama femenina en el club: «Cada día pienso que le estamos dedicando más atención. No es que hayamos dejado de presentarle atención, sino que se van formando y se está haciendo muy bien el trabajo desde abajo. Cada vez tenemos más jugadoras de calidad y, ahora, un buen juvenil, que esperamos que surta al sénior con el handicap de que, cuando llegan a los 18 años, pues, por desgracia para nosotros, muchas se nos van. Ojalá vuelvan. Cada vez veo con más calidad a nuestras categorías femeninas».

En cuanto al actual conjunto juvenil, presentado ayer, el entrenador Miguel López destacó que tratará de «dejar el nombre del equipo lo más alto posible» a través de «los valores del club, que son el esfuerzo, el sacrificio y la humildad». El objetivo es «nutrir al sénior femenino» y espera que «alguna pueda dar el salto a alguna categoría más alta el día de mañana». A nivel clasificatorio en la liga insular no hay metas, porque lo principal es «la formación de las jugadoras». «Ojalá podamos ser campeones e ir al sector», agregó.

Las capitanas de la escuadra juvenil del HC Eivissa Safragell intentarán «obtener el mejor resultado posible», según Yaiza Núñez, una de ellas. «Intentaremos esforzarnos lo máximo para poder llegar alto», agregó. La central y lateral comentó también las dificultades actuales para entrenar. «Lo hacemos sin contacto. No se nos permite estar juntas. Hay que respetar la distancia y la higiene, pero espero que de aquí a un tiempo se pueda entrenar en mejores condiciones y poder jugar», dijo.

Lucía Cortés, otra capitana, cree que hay «buen equipo». «Tenemos muchas cadetes que suben y nos pueden ayudar», añadió la lateral y extremo, que considera que la meta es «mejorar los resultados del año pasado, que acabó con un poco de mal sabor de boca al quedarse a la mitad».