Un instante de la sesión de entrenamiento celebrada ayer en la plaza de es Pratet. 

Al kickboxing insular no lo frena ni el coronavirus. La Federación Balear, con sede en Vila, ha visto cómo las restricciones implantadas desde el pasado fin de semana impiden que pueda desarrollar su actividad al formar parte de la zona de confinamiento. Para no ver alterado su programa de entrenamientos, ha decidido ir un par de calles atrás para que sus deportistas puedan seguir ejercitándose, aunque con las limitaciones lógicas de hacerlo en la calle. Desde ayer y hasta que se levanten las restricciones, llevan a cabo las sesiones de entrenamiento en la plaza de es Pratet, frente al Royal Plaza.

Joan Roig, presidente de la Federación Balear de Kickboxing, lamentó que «la orden del BOIB del sábado haga que cierren los centros deportivos». «Hemos estado ya tres meses sin entrenar y ahora hacen que cerremos otra vez cuando tenemos deporte escolar, escuela de seguimiento e iniciación», agregó el directivo, para quien hacer eso supondría que «de repente todo el trabajo hecho se quedara parado», expuso.

«Tuvimos una reunión con la consellera que nos dijo que arrancaría la competición en octubre y, luego, sanidad saca esta ley absurda», explicó Roig, para quien no tiene sentido esta medida dado que precisamente su centro es muy cuidadoso con los protocolos sanitarios: «Establecimos junto con el Consejo Superior de Deportes unos protocolos muy estrictos. Si vienes a la federación, la desinfección es total, desde los pies a meter los zapatos en una bolsa. Se desinfecta todo cuando alguien toca algo. Más seguridad es imposible. Pero nada; ahora es más segura la calle».

Dicen que hecha la ley, hecha la trampa. Desde el ente federativo se han movido para poder mantener viva la actividad y han decidido llevar a cabo los entrenamientos precisamente en la calle, dentro de una zona no restringida de Vila y cumpliendo las restricciones existentes –el hecho de no usar mascarilla se ampara en la no obligación de hacerlo en la práctica de cualquier deporte federado según el BOIB del 13 de julio–. La federación mantiene los mismos horarios –a las 18.00 horas comienzan los más pequeños y a las 20.00, los adultos–. «La idea es no parar. No podemos parar si se inician en octubre las competiciones a nivel nacional. ¿Llevamos a los nuestros desentrenados a competir?», explicó Joan Roig, a cuya federación no frena ni el coronavirus.