Sobre si ve temer la campaña deportiva después de que dos partidos de su grupo ya hayan sido aplazados por coronavirus y se estén llevando medidas de confinamiento en casi toda España, dijo que «va a depender un poco de esta semanas, que parece ser que a lo mejor las medidas restrictivas del gobierno son un poco más fuertes». «Dependerá de si hay más o menos contagios, se estabiliza o bajan las cifras. A nivel de fútbol y Segunda B, seguimos igual que en pretemporada y playoff. Ojalá todo se estabilice, bajen los contagios, podamos terminar la Liga y no haya interrupciones por el bien del fútbol y de todos. Sería señal de que bajan los contagios y conseguimos equilibrarnos», explicó el míster peñista.
En cuanto al adversario, después de haber jugado contra el Villarreal B y el Valencia Mestalla, quiso aclarar que no es ninguna perita en dulce: «Es un filial diferente. Siempre se ha caracterizado por tener jugadores más potentes o agresivos. Será un partido difícil. Viene de empatar contra el Villarreal B en su campo, que es difícil, y tiene buenos jugadores. Algunos han alternado con el primer equipo. Si alguien se piensa que es un filial más fácil, se equivoca».
Tras la disputa de las dos primeras jornadas, el conjunto de la Villa del Río no ha encajado ningún gol. En este sentido, Casañ afirmó que «era un punto débil» que quería mejorar. «Encajábamos muchos goles, pero también es verdad que marcábamos muchos. Era uno de los puntos que queríamos corregir. Nos falta, en la parcela de arriba, en la que hemos tenido que sustituir muchos jugadores, encontrar ese equilibrio de no encajar y llegar y marcar goles, que es difícil. Trabajamos para ello», expuso.
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