Los jugadores del equipo ibicenco celebran un punto en el último partido jugado en casa. | Marcelo Sastre

No pudo ser, pero estuvo muy cerca. La victoria se le escapó al UD Ibiza-Ushuaïa Voley cuando ya la tocaba con las yemas de los dedos. Los de Aitor Barreros hicieron un gran partido ante un conjunto temible como es el Unicaja Almería. La igualdad fue total y el encuentro se decidió en el definitivo y quinto set.

El duelo comenzó con igualdad. Intercambio de golpes y alternancias en el marcador en los primeros juegos. La primera ventaja la cobraron los locales que consiguieron abrir un pequeño hueco con el 8-5. Los celestes consiguieron neutralizar la ventaja poniendo el 10-10 en el marcador.

El partido volvió a entrar en una fase de igualdad, pero siempre con los andaluces, con un gran Colito, por delante. El hueco se abrió con el 18-15. Barreros intentó frenar con tiempos muertos, pero cayó el 20-15 y la distancia ya fue insalvable. La primera manga fue de color verde (25-19).

El segundo set comenzó con mucha igualdad, pero ahora eran los ibicencos los que iban por delante en el marcador. La primera ventaja importante llegó con el 6-10.

Aunque Unicaja intentó apretar para acercarse en el marcador, los pitiusos se mantuvieron firmes y consiguieron ir, poco a poco, aumentando la renta hasta el 13-20. El set fue muriendo hasta el definitivo 17-25. 1-1 a sets y partido nuevo.

La batalla estaba servida. Los Ushuaïa-Unicaja siempre ofrecen espectáculo y ayer no fue una excepción. La tercera manga fue un constante intercambio de golpes. Ninguno conseguía separarse en el marcador. El buen hacer de los de Aitor Barreros empezó a dar sus frutos cuando Makinen puso el 12-15.

Una ventaja de tres puntos que los visitantes defendieron con uñas y dientes ante los ataques andaluces. Al final, 23-25 para el lado ibicenco y un nuevo set por delante.

La batalla no cesó. Los celestes se agarraron al brazo del capitán Raúl Muñoz y el finlandés Makinen, que día tras día demuestra su enorme talento para este deporte. Ayer los dos sumaron 22 puntos para liderar el ataque. El intercambio de golpes fue total, pero esta vez la balanza cayó para los locales por idéntico marcador 25-23. Empate a dos y todo por decidir en el quinto y definitivo set.

Quinto set
Los andaluces comenzaron más entonados y pusieron el 4-2 en el marcador. La reacción pitiusa llegó rápido para poner el 4-4 y lograr la iniciativa con el 5-6. Con el 8-10 parecía que la victoria estaba cerca de los ibicencos, pero Almería apretó para volver a empatar. Nuevo arreón celeste para colocarse con 10-12, con un punto muy sufrido. A tres tantos del triunfo, ahora sí estaba cerca, pero un mal saque que se fue directamente fuera y un remate que no encontró la línea, permitieron que los locales le dieran la vuelta. 13-12. Sergio Ramírez ponía el 13-13, pero los anteriores errores habían dado vida al Unicaja, un equipo al que hay que matar cuando se puede. 14-13 y 15-14 para finiquitar el encuentro.
El Ushuaïa se quedó con la miel en los labios, pero cuajó un buen partido. El equipo sigue progresando y aunque está lejos de las primeras posiciones todo hace indicar que terminará estando donde, por nombre, tiene que estar.