Lanchon, a la izquierda, durante el partido del fin de semana entre el Harinus Ibiza Futsal y el Entreculturas Montesión. | Marcelo Sastre

Hablar de Estefan Lanchon es hacerlo de una de las personas que más dedicación y amor han profesado al fútbol sala en la isla de Ibiza en los últimos años. Sin hacer ruido, lo cierto es que ha decidido dejar de jugar y convertirse repentinamente en le nuevo entrenador del Harinus Ibiza Futsal, de Tercera División, con el que debutó como primer entrenador la semana pasada. El barcelonés criado en Ibiza cuelga las zapatillas a sus 33 años y parece difícil que vuelva a jugar a nivel federado, pero tampoco lo descarta. Su retirada es, por ahora, tan momentánea como silenciosa.

A Lanchon, que defendió durante años la camiseta de la Peña Deportiva, con el que jugó en Segunda B y Tercera División antes de ser uno de los creadores del proyecto del Ibiza Futsal, no le ha costado mucho tomar la decisión de abandonar el terreno de juego. «El club necesitaba un entrenador y económicamente no encontró a nadie en Ibiza ni, lógicamente, en la Península. Es un año para gastar lo menos posible y me ofrecí al cargo. Tampoco estaba muy motivado para jugar este año porque estaba lesionado y ya se lo había dicho en pretemporada a Nino –el brasileño ejercía de míster–, así que aquí vi la oportunidad de echar así una mano al club», explicó.

El nuevo técnico de los men in black desconoce si la retirada es definitiva o habrá marcha atrás: «Lo veremos en los próximos meses, porque yo ya tengo una edad y físicamente no estoy como hace 10 años. Ya veremos qué pasa».

La cuestión no le costó meditarla porque «no tenía nada claro empezar este año». «Al final, he podido ayudar al club, que es lo que siempre he hecho. Es más, estoy contento porque al club, de esta forma, no le sancionan por no tener un entrenador titulado», expuso el ahora míster, que hace un par de semanas estuvo «ayudando a Nino» y ya la pasada asumió el cargo. «Lo cogí principalmente por decisión del propio Nino, que quería que yo llevara el equipo con él echándome un cable, y porque muchos jugadores me animaron también a ello. Yo no quiero quitarle el sitio a nadie. La semana pasada empecé y estoy muy agradecido por la predisposición y trabajo de todos, que han sido mis compañeros.

Cuando empieza el entrenamiento están al cien por cien y eso es lo que les pido», afirmó Lanchon, que se estrenó en es Viver con un triunfo por 9-5 sobre el Entreculturas Montesión.

El ya exjugador apuntó que «es más complicado dirigir que jugar, porque tienes que estar pendiente de muchísimas cosas». Sobre el proyecto del Harinus Ibiza, comentó que «siempre se ha invertido en jugadores de fuera para intentar ascender, pero este año el proyecto se basa en gente de Ibiza y en luchar por quedar lo más arriba posible».

«Estamos en una crisis mundial y sería muy egoísta pensar en otras cosas ahora mismo», sentenció.