The Coastal Challengue, en Costa Rica, abre el calendario particular de este proyecto, cita que se celebrará desde el viernes hasta el día 15 del presente mes con 230 kilómetros de recorrido. Luego, tocará emprender rumbo al Ironman de Lanzarote, que se desarrollará el 22 de mayo y cuenta con 3.800 metros de natación, 180,2 kilómetros en bici y otros 42,2 de carrera a pie. Posteriormente, volverá a salir del país con motivo de la Volcano Ultramarathon Iceland, en Islandia, evento que transcurrirá entre el 25 de junio y el 5 de julio con 250.000 metros de distancia. La UTMB Val d’Aran, en Lleida, será el penúltimo paso de esta aventura el 9 de julio con un trazado non stop de 160 kilómetros. La traca final estallará con el Ironman de Barcelona el 3 de octubre, con las mismas distancias que el de Lanzarote.
Noguera se mostró feliz por este proyecto. «Voy a volver a correr», afirmó con una sonrisa de oreja a oreja. «Cuando tuve el accidente en moto yendo al colegio con mi hija, me fracturé el fémur por seis o siete sitios. Pensé que nunca más podría hacer deporte, pero ahora estoy totalmente recuperado. Peso unos 20 kilos menos y tenía algunas pruebas pendientes como volver a la selva. También tenía un tema pendiente con el Everest», expuso. Y es que, por si tuviera pocos retos por delante, se permitirá el lujo de tener una toma de contacto con dicho monte el 1 de noviembre. «La idea es aclimatarse para, el año que viene, intentar hacer cumbre. Será una toma de contacto con la gente de ahí y subir a 7.000 metros, que no es un regalo», comentó al respecto.
Kilómetros por Comida cuenta con el apoyo de la Asociación Deportiva Ibiza Half Triathlon, que es su club, y One Ibiza Suites, de la familia Verdera. Ellos se encargarán de recaudar los alimentos para su posterior donación.
Noguera no ve la hora de comenzar esta nueva andadura y se le hace la boca agua al hablar de la cita costarricense. «Es una de las tres mejores pruebas del mundo por etapas.
El viernes, a las siete de la mañana, voy para allá y llegaré sobre las ocho de la tarde. Este año, se seguirá una serie de medidas similares a las del Rally Dakar. Al llegar, te hacen las pruebas de la COVID-19, te trasladan al hotel y de ahí al campamento, en mitad de la selva», comentó.
El ibicenco ha podido solventar todo el tema burocrático «gracias a Fátima Blázquez», delegada de la Federación Balear de Montaña y Escalada. «Tengo que darle las gracias por haberme ayudado a tramitar toda la documentación para viajar», comentó al respecto Eusebio Noguera, todo un ejemplo de superación y solidaridad.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.