Raúl Casañ, en un momento del partido entre la Peña Deportiva y el L’Hopistalet. | Marcelo Sastre

La Peña Deportiva podría certificar hoy matemáticamente la permanencia en Segunda RFEF. Si el equipo peñista se impone esta tarde, a partir de las 18.00 horas, en el feudo del Espanyol B, duelo aplazado correspondiente a la tercera jornada, evitará el descenso a Tercera División.

Los peñistas cuentan todos sus partidos por victorias en esta segunda fase. Ha disputado cuatro de las seis jornadas y las batido a todos sus rivales, concretamente a los siguientes: Prat (1-2), L?Hospitalet (2-0 y 0-1) y Olot (2-1). Raúl Casañ, entrenador del conjunto santaeulariense, es consciente de la dificultad que entraña encadenar tantas victorias seguidas. «Sabemos lo difícil que es ganar dos partidos seguidos, así que ganar cinco después de todo lo que estamos pasando sería algo muy grande», indicó al respecto el técnico, que tiene claro que «hay que ir con cautela y humildad» a por los tres puntos.

A la dificultad de enlazar cinco triunfos hay que añadir la entidad del rival. El filial blanquiazul es actualmente el más inmediato perseguidor de los de la Villa del Río en la tabla clasificatoria. Es segundo con un coeficiente de 1,20 puntos por los 1,50 del cuadro santaeulariense. Sobre el equipo periquito, Casañ comentó que «es un equipo joven que, a nivel técnico y táctico, funciona muy bien». «Tiene jugadores con mucha calidad y desborde. Les falta experiencia, pero atacan muy bien. También se están jugando todo y harán todo lo posible por estar ahí hasta el final. Es un equipo joven con descaro, pero a nivel defensivo sufre más. Tienen jugadores de 18 a 20 años y, a este nivel, se nota», expuso.

El preparador de la Peña Deportiva, con las bajas de los porteros Torres y Fran, así como de los tres positivos por COVID-19, espera que la buena dinámica de los suyos continúe. Si en la primera fase salía mal todo lo que podía salir mal a pesar de merecer mejores resultados, ahora se ha girado la tortilla y suma de tres en tres incluso en choques que, por juego, igual no merecía: «En la primera fase, hubo siete u ocho partidos que se empataron o perdieron cuando habíamos merecido ganar o sacar algo más. El otro día, sin hacer nuestro mejor partido y sufriendo, ganamos incluso parando un penalti. La verdad es que tenemos la dinámica a favor y hay que aprovecharla. Eso que a veces te da o te quita, pues ahora que nos dé lo máximo para poder acabar salvados».