Paco Muñoz, Alberto Gallego y Sergio Tortosa, el día del ascenso. | Marcelo Sastre

El Club Deportivo Ibiza está «tranquilo» y mantiene la calma ante la posibilidad de que el Ayuntamiento de Ibiza ceda el estadio de Can Misses a la UD Ibiza, que acaba de dar un salto histórico a Segunda División.

Paco Muñoz, vicepresidente deportivo de la entidad rojilla, aseguró que existe una calma total entre los suyos: «No tenemos motivos para pensar que se nos vaya a tratar mal ni a excluir. Hemos manifestado una total empatía al Ayuntamiento de Ibiza. Sabemos que es un marrón porque se da un escenario que no se esperaba. Vivimos momentos maravillosos en el fútbol ibicenco en la ciudad. No creo que haya muchas ciudades de 50.000 habitantes en España que tengan un equipo en Segunda y otro en Segunda B».

El portavoz rojillo indicó que van a «colaborar en lo que se tenga que colaborar». «Nosotros eludimos cualquier tipo de enfrentamiento. Es un hito histórico. Tenemos total confianza en que el Ayuntamiento nos va a tener en cuenta como hasta el momento», concluyó Muñoz.

Con el salto a Segunda de la UD Ibiza, todo apunta a que se cerrará un convenio de cesión de Can Misses por parte del Consistorio con el club celeste. En caso de ser exclusivo, parece difícil que el Cedé pueda jugar ahí, pero ubicarle en otro lugar, después de haber conseguido el ascenso a Segunda RFEF, tampoco tiene pinta de ser fácil.