Una acción del partido disputado este sábado entre el Formentera y el Mallorca B. | SD Formentera

San Óscar Santiago, San Pablo, San Bonilla, San Borja Paris, San Jorge Mena, San Gorriz y podríamos seguir con el nuevo santoral de Sant Francesc. Incluso apareció un travesaño milagroso cuando apenas quedaba tiempo para más. La resistencia del Formentera fue total. Un ejercicio numantino ante un Mallorca B que lo intentó con todo, pero que no pudo. El Formentera consiguió aguantar el 0-0 durante más de 120 minutos y logró el ansiado ascenso a Segunda RFEF.

El inicio de partido fue un aviso del sufrimiento que venía por delante. Los primeros minutos fueron para el filial bermellón, este sábado de blanco, que salió a por todas. Poco a poco, los locales fueron igualando el encuentro, pero sin tener grandes ocasiones. La mejor un lanzamiento de falta de Julen Ekiza que se fue cerca del palo en el minuto 15.

Toda la acción esperaba en el segundo tiempo. Los mallorquines se hicieron dueños y señores del encuentro y empezaron a asediar la portería de Óscar Santiago. El primer susto llegó en el 55 en una jugada de estrategia que acabó en gol anulado a Quintana. La repetición ofrecía muchas dudas.

Tres minutos más tarde fue el central Pablo quien evitó el gol de Montalbán, tras una buena acción del atacante ibicenco del Mallorca B.

Nuevamente Montalbán tuvo el gol en una gran acción combinativa en la que se encontró con un salvador Óscar Santiago. Los mallorquines atacaban una y otra vez a un Formentera cada vez más cansado, con muchos jugadores con problemas físicos. Ese fue el paisaje con el que se llegó a la prórroga.

Prórroga

Si el asedio ya había sido importante durante la segunda parte, en el tiempo extra fue mucho más. Ambos equipos jugaban contra el reloj. El Mallorca B veía como pasaban los minutos y no eran capaces de perforar la portería formenterense, mientras que los locales hacían todo lo posible para que los segundos se fueran escapando.

La primera gran ocasión de la prórroga fue para el Formentera. En un balón parado prolongado en el primer palo, Pablo remató con la cabeza para encontrarse con una gran mano del ex de la Peña Deportiva, Leo Román.

En estos minutos, el encuentro entró en una zona en la que los rojinegros no sufrían demasiado ante un Mallorca B que hacía los últimos cambios para un arremetida final.
Este ataque a la desesperada llegó en la recta final de la prórroga donde las ocasiones se sucedieron. En el 115 llegó la primera gran ocasión. Tres minutos más tarde, Óscar Santiago evitaba el gol mallorquín con una parada de balonmano en un buen disparo de Gálvez.

En la acción inmediatamente posterior, el portero local estaba muy atento para abortar la intentona visitante adelantándose al delantero en un balón al espacio.

Aún quedaba la más clara del partido. Cuando se cumplía el 120, el balón le llegó a Gálvez en el corazón del área. La paró con el pecho y se sacó un remate de chilena que superó a Óscar Santiago para estrellarse en el larguero. El silencio se pudo escuchar en Sant Francesc.

El Mallorca B murió en el área del Formentera con una falta colgada al área a la que subió hasta el portero. La despejó Gorriz. No hubo más. El árbitro pitó el final y la fiesta se desató sobre el terreno de juego.